EFE
La Cámara de Diputados italiana aprobó el proyecto de ley que prevé eliminar las provincias de Italia, que a partir de 2015 se dividirá administrativamente en "ciudades metropolitanas", y con ayuntamientos que reunirán a varios municipios.
La Cámara baja confirmó la aprobación de esta normativa por parte del Senado -el pasado 26 de marzo- y lo hizo con 260 votos a favor, 158 en contra y 7 abstenciones, mientras que todas las enmiendas propuestas por la oposición fueron rechazadas.
El proyecto de ley aprobado modificará la estructura de las instituciones locales y supondrá, además, la fusión de diversos consistorios para que sean capaces de llevar a cabo las funciones que antes realizaban las provincias suprimidas.
Las nuevas "ciudades metropolitanas" corresponderán de hecho al territorio de las provincias de Turín, Milán, Venecia, Génova, Bolonia, Florencia, Nápoles, Bari, Reggio Calabria y Roma, que continuará siendo la capital de Italia.
A estas ciudades metropolitanas se añadirán, además, las ciudades de las regiones con régimen de autonomía especial: Trieste (Friuli-Venezia Giulia), Palermo, Catania y Mesina (Sicilia) y Cagliari (Cerdeña).
En cuando a los órganos de las nuevas ciudades metropolitanas, la ley prevé un alcalde metropolitano y dos asambleas presididas por dicho alcalde: el Consejo metropolitano (órgano de control y dirección) y la Conferencia metropolitana (órgano deliberativo).
La aprobación de esta ley se enmarca dentro de los planes reformistas del Gobierno del primer ministro Matteo Renzi, que pretende reducir los costes de la política y agilizar el funcionamiento del Estado.
Asimismo, con esta reforma, el Ejecutivo estima que se suprimirán cerca de 3.000 cargos políticos y se ahorrarán sobre 800 millones de euros.
El propio Renzi ha publicado un mensaje en su perfil de la red social Twitter en el que ha afirmado que, con esta normativa, "3.000 políticos dejarán de recibir una pensión del bolsillo de los italianos".
No será el único trámite que el Ejecutivo de Renzi de Florencia lleve a cabo en relación con la administración pública y con las instituciones regionales.
Esta supresión de las provincias forma parte de una reforma más amplia que fue presentada hace unos días por el Gobierno y que tiene el objetivo de modificar el Título V de la Constitución, que regula las relaciones entre el Estado y los entes locales para devolver al poder central competencias que han sido asumidas por las regiones.
2014-04-03