BBC
Aplanar, nivelar, allanar las montañas: eso es lo que está haciendo el país asiático impulsado por su necesidad de crear nuevos terrenos para construir.
Pero la tarea de mover la tierra desde las montañas a los valles –y a la escala en que se está realizando en China- supone enormes riesgos para el medio ambiente, según advierten los científicos.
Investigadores de la universidad china de Chang’an sostienen que decenas de montañas ya han sido niveladas, y entre los problemas que esto está causando se incluyen la polución del agua y del aire, erosión del suelo e inundaciones.
Además, señalan los expertos en un trabajo publicado en la revista científica Nature, esta actividad está sucediendo a una escala sin precedentes.
"Como no ha habido proyectos de creación de terreno como este en el mundo, no hay una guía", dice Peiyue Li, de la Escuela de Ingeniería y Ciencias Medioambientales de Chang’an.
Las ciudades chinas se están expandiendo rápidamente a la par que su economía, y mover montañas es una forma de obtener más tierras para la construcción de viviendas y edificios.
Alrededor de una quinta parte de la población del país –con más de 1.300 millones de habitantes– vive en áreas montañosas.
A lo largo y ancho de China, en ciudades como Chongqing, Shiyan, Yichang, Lanzhou y Yan’an, se han aplanado decenas de cumbres.
La tierra y las rocas de esas cimas se usan para llenar valles, y esto ha creado hasta ahora cientos de kilómetros cuadrados de terreno plano.
Escala "incomparable"
"Ciudades montañosas como Yan’an están en su mayoría localizadas en valles relativamente llanos", explica Li.
"Esos valles son estrechos y limitan el desarrollo de las ciudades. Y la gran densidad de población es también un factor".
Aunque la remoción de cumbres montañosas a veces se utiliza en la industria minera, particularmente en Estados Unidos, los investigadores dicen que la escala de esta actividad en China es incomparable.
Ellos advierten que al convertir las cumbres en planicies se están lanzando partículas de polvo a la atmósfera, contaminando canales de agua, causando deslaves e inundaciones y poniendo en peligro a animales y plantas.
Y además, añaden los científicos, la nueva tierra allanada podría no ser apropiada para sostener construcciones.
"El problema más preocupante es la seguridad de las ciudades en construcción sobre los terrenos recién creados", dice Li.
"Yan’an, por ejemplo, es el mayor proyecto jamás intentado sobre un suelo compuesto de grueso limo".
"Ese tipo de suelos blandos pueden hundirse cuando se humedecen, causando colapsos estructurales y hundimiento de tierra. Construir sobre esos terrenos es bastante peligroso y llevará mucho tiempo que el suelo se estabilice".
Calcular los riesgos
Los investigadores creen que el gobierno chino debería trabajar en conjunto con expertos nacionales e internacionales para estimar los riesgos antes de continuar con esta actividad.
La BBC consultó a Brian McGlynn, de la Universidad Duke, en Estados Unidos, para conocer su opinión sobre la advertencia de los científicos chinos.
"En Estados Unidos y en China estamos avanzando sin mucho conocimiento sobre cuál será el resultado, especialmente en lo que respecta al agua, la hidrología, las implicaciones para la calidad del agua", afirmó McGlynn.
"El artículo (de Nature) se centra en los problemas estructurales, la capacidad del suelo para estabilizarse. Además de eso, estamos cambiando el curso del agua y el material con que entra en contacto".
"Con estos cambios estamos entrando en un terreno nuevo", añadió por su parte Jan Zalasiewicz, de la Universidad de Leicester, en Reino Unido.
"También hay otros proyectos, como las islas Palm en Dubái, que están moviendo miles de millones de toneladas de material de un sitio a otro para crear un paisaje nuevo".
"Y mientras que los humanos han estado haciendo esto a pequeña o moderada escala por bastante tiempo, esto ahora excede el estado de proceso natural", concluyó Zalasiewicz.