EFE
La labor de casi 5.000 bomberos, ayudados por las bajas temperaturas registradas durante el fin de semana, permitieron apaciguar varios de los incendios que azotan el sur de California (EE.UU.), lo que ha motivado a las autoridades a dejar sin efecto las órdenes de evacuación en el área.
No obstante, este respiro, tras casi una semana de incendios en el condado de San Diego, contrasta con las declaraciones ofrecidas por el gobernador estatal, el demócrata Jerry Brown, quien durante una entrevista en el canal ABC indicó que California se "está preparando para lo peor".
Durante una aparición en el programa "This Week", Brown afirmó que la población de este estado se enfrenta a una estación de incendios "más seria" de lo que se ha previsto anteriormente, la misma que hasta el momento ha demandado ya cerca de 600 millones de dólares para labores de emergencia y recuperación.
El gobernador resaltó que la situación ocasionada por los incendios tiene una relación directa con los efectos del cambio climático, una realidad que, aunque negada por los republicanos, coloca a California en la "primera línea" de esta problemática, según afirmó.
Asimismo, destacó que en el futuro la actual cifra de 5.000 bomberos implicados en el sofoco de las llamas podría resultar insuficiente y que se requerirían miles de efectivos adicionales.
"Y en los años venideros vamos a tener que hacer inversiones y modificaciones muy costosas", precisó, a la vez que instó a la población a ser cautos respecto a la forma en que viven y cómo construyen sus hogares.
Brown se refirió a las regulaciones que se han aplicado en este estado con el fin de reducir la emisión de gases de efecto invernadero y adelantó que aún se gestionarán más medidas en ese sentido.
"Vamos a lidiar con la naturaleza de la mejor manera, pero la humanidad sigue un curso de colisión con la naturaleza y vamos a tener que adaptarnos de la mejor manera que podamos", recalcó el gobernador.
Las autoridades locales han estimado que lo más pronto posible varias familias retornarán a sus hogares tras el levantamiento de las órdenes de evacuación, muchas de las cuales hallarán sus casas arrasadas por las llamas.
Desde hace casi una semana, el condado de San Diego sufrió los embates de cerca de una decena de incendios por la región, los cuales hasta la fecha han ocasionado pérdidas por más de 20 millones de dólares, de acuerdo con las autoridades locales.
Los bomberos continuaron hoy con el despliegue para apagar las llamas que han devorado muchas áreas del norte del condado, en especial, los suburbios de San Marcos y Carlsbad.
Hasta el momento, las autoridades no han informado sobre las posibles causas que originaron los incendios.