AVN
El expresidente de Brasil, Luiz Ignacio "Lula" Da Silva rechazó este jueves el asedio judicial y las falsas acusaciones por supuesta corrupción a las que está siendo sometido.
Durante una rueda de prensa transmitida por Telesur, desde la sede del Partido de los Trabajadores (PT) en Sao Paulo, el líder socialista, se refirió a la persecución política que han perpetrado en su contra sectores de la derecha brasilera, e indicó que la denuncia por corrupción presentada este miércoles por el Ministerio Público de Brasil carece de pruebas.
"Tengo mi conciencia tranquila, nadie respeta la ley en este país más que yo (…) Prueben que hice un acto de corrupción e iré a pie a entregarme. Si ellos quieren derrumbarme tendrán que salir a luchar los votos", afirmó Da Silva al tiempo que exigió que las acusaciones en su contra sean sustentadas con base a pruebas fehacientes y no a creencias o "piotecnias".
El ex mandatario brasileño indicó que esta denuncia constituye una mentira que se propone acabar con su vida política, luego del golpe de Estado parlamentario consumado contra la presidenta legítima Dilma Roussef.
"Como en un enredo de folletín, crearon un epílogo: eligieron a Michel Temer, destituyeron a Dilma Roussef y después a el diputado Eduardo Cunha; y ahora quieren destruir mi vida política que construí caminando por todo el país. Creo que en este país hay pocas personas con una vida más expuesta que la mía", afirmó.
Señaló que hay una persecución explícita contra su formación socialista.
2016-09-15