EFE
El expresidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva afirmó hoy que en los próximos meses se dedicará a divulgar los logros de su ahijada política y sucesora en la Presidencia, Dilma Rousseff, que puede aspirar a la reelección en octubre, ya que la mayoría de la población parece desconocerlos.
"Voy a llamar la atención de una cosa que está ocurriendo en este país. Creo que, por el tratamiento que la prensa le ha dado al Gobierno, el pueblo brasileño no conoce ni el 30 % de lo que el Gobierno de Dilma (Rousseff) ha hecho", afirmó Lula.
El exjefe de Estado se refirió a los logros de su sucesora en un encuentro de dirigentes del oficialista Partido de los Trabajadores (PT) este viernes en la ciudad de Porto Alegre en el que también participó la mandataria.
Las declaraciones de Lula coinciden con la divulgación de una encuesta que indica que Rousseff, pese a que sigue liderando los sondeos de intención de voto para las elecciones del 5 de octubre próximo, perdió fuerza y ya no cuenta con el apoyo suficiente para garantizar la reelección sin necesidad de una segunda vuelta.
Aunque la mandataria aún no ha anunciado oficialmente si disputará las elecciones, el PT considera su candidatura como un hecho y el propio Lula ha manifestado su disposición de participar activamente en la campaña electoral.
En su discurso en la reunión partidaria en Porto Alegre, Lula se dijo impresionado con la falta de conocimiento de la juventud de los avances registrados en Brasil en los últimos 11 años, desde que él asumió su primer mandato, en enero de 2003.
"Me di cuenta de lo que está ocurriendo de equivocado, es un proceso de desinformación premeditado en este país", aseguró el exgobernante al dar a entender de que la mayor parte de la prensa brasileña se abstiene de informar sobre los logros del Gobierno.
Sobre la desaceleración de la economía brasileña, a la que analistas atribuyen la caída de Rousseff en las encuestas, Lula aseguró que Brasil no puede evitar los efectos de una crisis que afecta a todo el mundo.
"Estoy convencido de que a Dilma le gustaría que la economía estuviera creciendo si no al 30 % por lo menos al 5 % anual. Pero somos conscientes de que hay una crisis global, equivalente a la crisis de 1929″, afirmó.
El expresidente dijo estar más interesado en la disputa electoral de este año que en la campaña en la que fue elegido jefe de Estado por primera vez, en 2002.
"Lo que está en juego no es la candidatura de Dilma sino un proyecto", afirmó el exmandatario, para quien el proyecto del PT está comprometido con la lucha contra la pobreza y la integración latinoamericana, entre otras cosas.
Lula instó a los militantes del PT a defender el Gobierno poco después de que la última encuesta del Instituto Datafolha mostrara que las intenciones de voto a favor de Rousseff bajaron del 37 % en mayo a un 34 % en junio.
Tras la mandataria se ubicaron el senador Aecio Neves, candidato del opositor Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB), con el 19 %, y el exgobernador del estado de Pernambuco Eduardo Campos, aspirante por el Partido Socialista Brasileño (PSB), con el 7 %.
El sondeo mostró que, en el actual escenario, las elecciones del 5 de octubre próximo pudieran ir a una segunda vuelta, necesaria en caso de que ningún candidato supere el 50 % o no acumule más votos que todos sus rivales juntos.