El Cairo, 30 may (EFE).- El guía supremo de los Hermanos Musulmanes egipcios, Mohamed Badía, ha sido condenado a una nueva cadena perpetua junto a otros 35 miembros de esta agrupación islamista acusados de incitar y protagonizar actos de violencia y asesinatos.
El Tribunal Penal de la ciudad de Ismailiya, 140 kilómetros al noreste de El Cairo, encontró a los acusados culpables de incitar y perpetrar acciones de violencia en Islamiliya, planear la ocupación armada de la sede de la Gobernación, de asesinar a tres civiles y de tener la intención de matar a otras 16 personas, en unos sucesos que se remontan a julio de 2013.
Según informa la agencia oficial de noticias egipcia MENA, otros 49 procesados fueron sentenciados a penas de cárcel de entre 3 y 15 años, mientras que otros 20 fueron declarados inocentes.
El tribunal los juzgaba por los altercados ocurridos en esta ciudad tras el golpe de Estado militar perpetrado el 3 de julio de 2013 al calor de unas protestas populares contra el entonces presidente egipcio y miembro de los Hermanos Musulmanes, Mohamed Morsi.
Tras hacerse con el poder político, el Ejército lanzó una represión contra la organización islamista, declarada grupo terrorista por las autoridades, y contra los movimientos políticos de izquierda que participaron tanto la revolución del 25 de enero de 2011 como en las protestas de junio de 2013 contra la cofradía dirigida por Badía.
Sobre el guía supremo de los Hermanos Musulmanes pesan dos penas de muerte: una por el caso de la fuga de la cárcel de Wadi Natrun durante la revolución de 2011, que forzó la caída del entonces presidente Hosni Mubarak, y otra por los sucesos ocurridos en la plaza de Rabea, donde el 14 de agosto de 2013 las fuerzas de seguridad desalojaron violentamente a los manifestantes contrarios a la asonada militar.
En esa ocasión Badía y varios dirigentes estaban acusado de organizar una "sala de operaciones" para enfrentarse a las fuerzas de seguridad.
La última cadena perpetua emitida contra Badía se remonta al 22 de agosto de 2015 cuando el Tribunal Penal de la ciudad de Port Said, lo encontró culpable junto a otros 18 dirigentes y miembros de la organización de instigar a la violencia en agosto de 2013 en esa localidad. EFE
20016-05-30