Nueve soldados y dos atacantes suicidas murieron hoy en dos atentados en la península del Sinaí, en Egipto.
Dos de los soldados no pudieron ser identificados en un primer momento, por eso las fuerzas de seguridad se refirieron al principio sólo a siete soldados fallecidos. Además hay once soldados y siete civiles heridos.
Por el momento nadie asumió la responsabilidad de los atentados, que fueron cometidos con coches bomba, pero la policía sospecha que los autores fueron yihadistas.
Según fuentes de los servicios de seguridad, el primer atentado se produjo ante la entrada de un edificio de los servicios secretos, en la ciudad de Rafah, en la frontera con la Franja de Gaza. El segundo atacante estrelló casi de forma simultánea el vehículo cargado de explosivos en el que viajaba contra un puesto de control de Rafah. Las fuerzas de seguridad egipcias lanzaron hace cinco días una nueva ofensiva contra los yihadistas en el norte de la península del Sinaí.
El grupo terrorista Ansar Beit al Makdis, que actúa en la zona, asumió la autoría del reciente atentado contra el ministro de Interior, Mohammed Ibrahim, que salió ileso del ataque.
En un comunicado emitido hoy, Ansar Beit asegura que los distintos grupos yihadistas colaboraron en algunas operaciones durante las últimas semanas.
Por otro lado, un miembro de las fuerzas de seguridad de la ciudad de Suez aseguró que se elevó el número de controles, para evitar posibles nuevos ataques en el canal del mismo nombre.
El norte del Sinaí es desde hace años una porvincia volátil y tras la caída de Hosni Murbarak, en 2011, aumentó el número de ataques yihadistas ante el vacío de poder./DPA