El nuevo jefe del Ejército argentino, César Milani, dijo hoy que las acusaciones en su contra sobre su supuesta participación en la última dictadura militar (1976-1983) buscan en "última instancia" perjudicar al Gobierno de la presidenta Cristina Fernández que le designó en ese puesto.
En declaraciones publicadas hoy en el sitio web oficial del Gobierno, el general Milani afirmó que existe "una campaña de desprestigio y difamatoria con el objetivo de perjudicar" su "trayectoria militar" y su "buen nombre y honor".
"Por consiguiente, esa campaña busca desprestigiar la imagen del Ejército y, en última instancia, persiguen el fin político de perjudicar al Gobierno nacional. Las acusaciones que estos difamadores profesionales han hecho trascender en los medios son falsas", aseguró.
Desde la decisión adoptada semanas atrás por Fernández, que designó a Milani al frente del Ejército en reemplazo del teniente general Luis Alberto Pozzi, varios dirigentes de la oposición y de organismos de derechos humanos cuestionaron el rol que el nuevo jefe militar desempeñó durante la dictadura.
El escándalo aumentó después de que Ramón Olivera, un expreso político, asegurara que Milani participó del proceso de su detención ilegal de su padre en la provincia norteña de La Rioja, en 1977.
Autorizado por el ministro argentino de Defensa, Agustín Rossi, el jefe militar también se presentó el pasado jueves ante un tribunal de la Rioja para negar esa acusación.
En una entrevista publicada hoy por el diario Página/12, de Buenos Aires, Milani reiteró que no es cierto que haya participado de la detención del padre de Ramón Olivera.
"Ese día, me fijé en el legajo, estaba sancionado por haberme quedado dormido. Y menos todavía trasladé al propio Olivera. (…) Todo es mentira", afirmó el jefe militar.
A su juicio, el "trasfondo" de estas denuncias es montar una campaña en su contra pues él, aseguró, está a favor de "un Ejército al servicio de un proyecto nacional y popular" liderado por Cristina Fernández.
"Lo ratifico: sí, quiero ser parte de un Ejército que sea parte de un proyecto nacional, que ayude a construir obras de infraestructura, que desarrolle el país", sostuvo.
"Digo que hay una campaña porque acá los sectores conservadores creen que las Fuerzas Armadas son sus aliadas. Y aparezco yo diciendo que queremos ser parte de un proyecto nacional y popular", añadió Milani.
Organizaciones humanitarias cercanas al Gobierno, como Abuelas de Plaza de Mayo, se han mostrado cautas y han asegurado que por ahora no cuentan con información que relacione al jefe militar con el accionar represivo, pero han pedido a la Justicia que investigue.
El pliego de ascenso de Milani del rango de general de división a teniente general será analizado este lunes en comisiones en el Senado.EFE