El presidente Barack Obama inició el sábado las primeras vacaciones de verano de su segundo período en Martha’s Vineyard, cambiando los debates en Washington sobre el presupuesto, los programas de vigilancia electrónica del gobierno y la reforma de los servicios médicos por nueve días de golf, la playa y reuniones informales con amigos y familiares.
Obama llegó a la isla en la costa de Massachusetts después de dirigirse a la Convención Nacional de Veteranos de Guerra de Estados Unidos, que se celebra en Orlando, Florida.
Cuando el avión Air Force One tomaba rumbo norte, Obama se lanzó de lleno al espíritu vacacional al cambiar su traje y corbata por una indumentaria más apropiada: pantalones kaki y una camisa azul remangada. La primera dama Michelle Obama, quien lo presentó en la convención, mantuvo su vestido amarillo y blanco, pero cambió sus tacones por unos zapatos beige bajos.
Sus hijas Malia y Sasha planeaban reunirse con ellos más tarde, mientras Bo, el perro presidencial, tomaba el vuelo.
La gente se congregó a ambos lados de la doble vía mientras la caravana de Obama se alejaba de donde el helicóptero Marine One aterrizó en Edgartown, para dirigirse a la residencia de seis habitaciones que ha alquilado en Chilmark. Muchas personas saludaron y tomaron fotos, y unos cuantos portaban letreros contra el propuesto oleoducto Keystone XL, que iría desde Canadá hasta la zona costera sobre el Golfo de México si el gobierno lo aprueba.
A diferencia de otras vacaciones aquí como presidente, Obama ha molestado a algunos vecinos. Eso se debe a que el Servicio Secreto ha prohibido el tráfico vehicular desde una parte de una vía pública cerca de la residencia. El cierre es el primero en unas vacaciones de Obama y amenaza con afectar la vida diaria de esta isla, refugio de los adinerados.
Aunque Obama no planea ninguna presentación pública durante los nueve días que pasará aquí, se ha visto a su caravana llevarlo desde campos de golf a playas y restaurantes.
Obama debe regresar a Washington dentro de ocho días.
Pero como el presidente nunca está realmente de vacaciones, recibirá informes regulares sobre asuntos de seguridad nacional y otros temas del país, dijo Jay Carney, secretario de Prensa de la Casa Blanca. Susan Rice, asesora de seguridad nacional, y Rob Nabors, subjefe de despacho, están entre el pequeño contingente de asistentes que acompañarán a Obama durante las vacaciones.
Más allá de eso, Obama jugará golf, irá a la playa, compartirá con amigos y familiares y leerá algo más que informes oficiales.
"Sé que planea hacer mucho con su familia", dijo Carney el sábado. "Estoy seguro de que verá a algunos amigos".
Obama ha vacacionado en Martha’s Vineyard antes de ser presidente y después la visitó en 2009, 2010 y 2011.
Pero Obama, que es millonario gracias a las ventas de sus libros, no visitó la isla durante la campaña presidencial del año pasado, probablemente para evitar percepciones de elitismo al tiempo que se presentaba como un campeón de la clase media en una recia campaña contra el republicano Mitt Romney, que tiene mucho más dinero.
Sin embargo, la percepción pública es menos importante si uno no tiene que enfrentarse de nuevo a los electores. Ese es el caso de Obama y lo ha recalcado en discursos últimamente.
El presidente y su familia acamparán nuevamente en Chilmark, una zona del extremo oeste de la isla llena de residencias multimillonarias. Entre sus vecinos famosos están los actores Ted Danson y su esposa Mary Steenburgen, así como Michael J. Fox, la cantante Carly Simon y el cabildero Vernon Jordan.
Los Obama tuvieron que escoger otro lugar después que la Finca Blue Heron, la alejada propiedad que alquilaron del 2009 al 2011, fue vendida. El nuevo lugar está más cerca de vías públicas, lo que ha obligado al Servicio Secreto a prohibir el tráfico vehicular en las cercanías.
"Mi respuesta a esto es que el presidente ha visitado nuestro pueblo tres veces y ha sido muy cordial, con pocos problemas, nos encanta que esté aquí", dijo Warren Doty, funcionario de Chilmark, según un reportaje en la página electrónica del Vineyard Gazette. "Pero esto cambiaría la situación… y causa muchos problemas".
El gobierno del poblado también envió un mensaje electrónico a los vecinos diciéndoles que "a los que les moleste el cierre (de vías) deben llamar o escribir a la Casa Blanca".
Desde que fue electo presidente en 2009, Obama ha hecho 14 viajes de vacaciones por un total de 92 días, según Mark Knoller, reportero de CBS que le sigue la pista a los viajes del presidente. En el mismo punto de su presidencia, George W. Bush había hecho 50 visitas a su rancho de Texas por aproximadamente 323 días. Además, Bush también había hecho siete viajes a la propiedad familiar en Maine, donde pasó unos 26 días.
Las cifras no incluyen las visitas al retiro presidencial de Camp David en Maryland. /AP