EFE
La constructora brasileña Odebrecht negó este lunes que hubiera pagado al grupo guerrillero Farc en los años 90 para realizar "sin problemas" obras de infraestructura en territorio colombiano, como denunció la revista Veja de Brasil.
Así lo asegura la empresa en un comunicado en el que además manifiesta su "sorpresa" por esa publicación, según la cual en los "últimos 20 años" la empresa habría pagado a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (Farc) entre 50.000 y 100.000 dólares por mes en concepto de "permiso" para realizar sus obras.
Odebrecht recuerda que volvió a Colombia en 2010, después de 10 años fuera de la nación andina, cuando empezó a trabajar en la construcción de la carretera Ruta del Sol II, que conecta al centro con el norte del país y que aún no ha sido concluida.
El jefe guerrillero Félix Antonio Muñoz, alias "Pastor Alape" ya había dicho el pasado 6 de marzo que las FARC no tienen conocimiento acerca de la supuesta entrega de dinero de la constructora a ese grupo armado para poder realizar sus obras en Colombia.
Según el gerente de Seguridad Física, Patrimonial y Social de Odebrecht en Colombia, el coronel de la reserva del Ejército Alberto Restrepo, nunca tuvo noticia ni indicios de pagos de esa naturaleza.
"Desde que la empresa volvió a actuar en el país, en la construcción de la Ruta del Sol y en la recuperación de la navegabilidad del río Magdalena, no fuimos objeto de acciones extorsivas por parte de las FARC", asegura Restrepo en un comunicado de Odebrecht.
El militar retirado añadió que en noviembre de 2016 el Ejército de Liberación Nacional (ELN), segunda guerrilla del país, realizó una escalada terrorista a unos tramos de la Ruta del Sol pero que "tales hechos fueron denunciados inmediatamente a la Policía Nacional y a la Fiscalía 47 de Antiterrorismo sin que la empresa haya satisfecho ninguna exigencia".
"No tenemos ni tuvimos ningún tipo de relación con ningún grupo al margen de la ley en Colombia", reiteró Restrepo entre otras cosas porque combatió, como militar activo, a las FARC y al ELN, y porque "la premisa fundamental para formar parte de esta empresa era no actuar, apoyar ni financiar grupos al margen de la ley".
Además, porque Odebrecht nunca lo orientó a "patrocinar económicamente organizaciones narcoterroristas" y porque "obedecemos un protocolo de seguridad que tiene como fundamento una rigurosa determinación corporativa de no negociar con grupos ilegales".
De acuerdo con una fuente vinculada a la empresa, no tiene ningún sentido negar algún delito en momentos en que esta se abre a órganos fiscalizadores de diversos países con el objetivo de pasar su conducta a limpio y reconquistar la credibilidad para cumplir sus compromisos de forma ética, íntegra y transparente.
"Estamos haciendo todos los esfuerzos posibles para reconstruir nuestra reputación. Queremos que la experiencia de Odebrecht sea usada como ejemplo de cambio de actitud real y que pueda alentar a otras empresas a hacer lo mismo, aunque sea enfrentando las duras consecuencias que hemos enfrentado", señaló la compañía.
2017-03-13