Por lo menos unas 100 personas murieron en una violenta ofensiva del gobierno cerca de Damasco, en ataques en que algunos activistas afirmaron las tropas del régimen usaron "gas venenoso".
El gobierno negó el miércoles las versiones de que sus tropas hubiesen usado armas químicas, desechando las afirmaciones de la oposición que calificó de infundadas.
Rami Abdul-Rahman del Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, con sede en Gran Bretaña, destacó que tenía sustentado con documentos de por lo menos 100 muertes en el ataque del miércoles. Indicó que no está claro si las víctimas murieron a causa del cañoneo o por los ataques con gas tóxico.
Otros grupos de activistas, entre ellos, Comités de Coordinación Local, afirmaron que cientos de personas murieron el miércoles en un ataque con "armas químicas en suburbios del este de Damasco, basándose en los síntomas que sufrieron las víctimas. La disparidad en las cifras es común en los primeros instantes después de un ataque en Siria, donde el gobierno restringe el periodismo nacional y extranjero.
Las aseveraciones se difundieron mientras un equipo de 20 expertos en armas químicas de la ONU, encabezados por el sueco Ake Sellstrom, se encuentra en Damasco desde el domingo para investigar tres sitios donde supuestamente hubo ataques con armas químicas.
El Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, dijo que hubo cañoneo intenso contra los suburbios de Zamalka, Arbin y Ein Tarma.
Dijo que activistas reportaron que las fuerzas del régimen dispararon "cohetes con ojivas cargadas con gas venenoso" en el ataque que mató a "decenas de personas".
Rami Abdul-Ramán, jefe del Observatorio, dijo que los activistas en el área informaron que "gas venenoso" fue lanzado con cohetes y también desde el aire. Agregó que las fuerzas del régimen emprendieron una extensa ofensiva contra suburbios del este y oeste de Damasco que están en manos de los rebeldes.
Abdul-Ramán dijo que se ha confirmado la muerte de más de 40 personas y que la cifra podría llegar a 200 en los suburbios de la capital.
El gobierno sirio ha refutado las acusaciones de la oposición sobre el uso de armas químicas y dice que los rebeldes que buscan derrocar al presidente Bashar Assad han utilizado este tipo de armamento.
Tras los reportes del miércoles, el Observatorio exhortó al equipo de la ONU en Siria y a todas las organizaciones internacionales "a visitar las áreas golpeadas y garantizar que la ayuda médica llegue a la gente tan pronto como sea posible". También pidió investigar el ataque.
Mohamed Saíd, un activista en el área, dijo a The Associated Press por Skype que cientos de muertos y heridos fueron llevados a seis clínicas improvisadas en los suburbios orientales de Damasco.
"Esta es una masacre con armas químicas", dijo Saíd. "La visita del equipo de la ONU es una farsa… Bashar está usado las armas y diciéndole al mundo que no le importa".
Uno de los sitios que investigará el equipo de la ONU es el poblado de Jan al-Assal, al oeste de la asediada ciudad norteña de Alepo. Los otros dos sitios se mantienen en secreto por razones de seguridad.
De confirmarse el ataque químico del miércoles, sería la denuncia más grave desde el supuesto ataque del 19 de marzo en in Jan al-Assal donde perecieron al menos 30 personas. Assad y los rebeldes se culpan uno al otro de la agresión.
La revuelta en Siria comenzó en marzo de 2011 y se convirtió en una guerra civil. Desde entonces han fallecido más de 100.000 personas, de acuerdo con la ONU./AP