El presidente paraguayo saliente, Federico Franco, dijo hoy que Paraguay "ha subsidiado el desarrollo de São Paulo y Buenos Aires en los últimos tiempos", con la cesión de energía hidroeléctrica de las represas que comparte con Argentina y Brasil.
"Creemos que Paraguay ha cumplido su deuda con Itaipú y ha pagado mas de lo que le corresponde. Paraguay debe pedir una evaluación de nuevo de todo lo relacionado con la deuda y no esperar al 2023″, cuando se revisa el tratado de la represa, advirtió Franco en rueda de prensa en Asunción.
Paraguay tiene derecho al 50 por ciento de la energía producida por las represas de Yacyretá e Itaipú, que comparte con Argentina y Brasil, pero ante la falta de una línea de distribución eficiente y una menor demanda cede a los países vecinos el excedente que le corresponde.
En el caso de Itaipú, Paraguay recibe desde 2011 una paga de 360 millones de dólares anuales por esa cesión a Brasil, mientras Argentina abona en torno a 120 millones.
Según Franco, Paraguay pagó por la deuda de Itaipú unos intereses "en el mejor de los casos no coincidentes con la realidad durante la década de los 80″.
El presidente paraguayo recordó que su Gobierno ha conformado "un grupo multidisciplinar con los tres poderes del Estado" para pedir una "justa reivindicación" de los términos del tratado de Paraguay con Brasil.
Franco dijo tener el "convencimiento de que la deuda con Brasil está abonada hace mucho tiempo".
Y con respecto a Yacyretá, aseveró que Paraguay "no debe absolutamente nada" a Argentina.
Franco, que asumió la Presidencia el 22 de junio pasado tras la destitución de Fernando Lugo en un juicio político, expresó en reiteradas ocasiones que su país debe dejar de ceder a Argentina y Brasil la energía que le corresponde de ambas centrales de electricidad y utilizarla para su industrialización.
La destitución de Lugo provocó el 29 de junio pasado la suspensión de Paraguay de la Unasur y el Mercosur. EFE