El Partido Liberal, la formación más antigua de Canadá, elegirá mañana a su nuevo líder y todos los analistas consideran que Justin Trudeau, uno de los hijos del icónico ex primer ministro Pierre Trudeau, será el ganador.
Más de 127.000 personas, tanto militantes del partido como simpatizantes, que por primera vez en la historia de la formación pueden elegir el nuevo líder, tienen hasta las 18.00 GMT del domingo para votar electrónicamente quién dirigirá a los liberales.
Aunque el puesto se lo disputan seis personas, los analistas dan por seguro que Justin Trudeau, de 41 años de edad e hijo del histórico exprimer ministro, será elegido para el puesto.
El nuevo líder será el cuarto que el Partido Liberal, que ha dominado el mundo político canadiense desde la creación del país en 1867, ha tenido desde que la formación política perdió las elecciones generales de 2006 a manos del Partido Conservador del actual primer ministro canadiense, Stephen Harper.
Tras la derrota electoral de 2006, los liberales eligieron dos intelectuales.
Primero al exministro Stéphane Dion, autor de la Ley de la Claridad, que otorga al Parlamento federal la prerrogativa de supervisar las condiciones y resultados de un futuro referendo separatista en Québec.
Dion duró sólo dos años en el cargo y fue sustituido en 2008 por el autor y pensador Michael Ignatieff. A su vez, Ignatieff dimitió en mayo de 2011 tras el descalabro electoral del partido en las elecciones generales de ese año.
Tanto Dion como Ignatieff fueron incapaces de resistir la maquinaria de comunicaciones del Partido Conservador, que los castigó incesantemente desde el momento en que fueron elegidos para dirigir a los liberales.
Tras la dimisión de Dion, y hasta mañana, el partido ha estado dirigido de forma interina por un veterano político que fue el primer ministro de la provincia de Ontario, la más industrial del país, Bob Rae.
Los liberales, que gobernaron de forma ininterrumpida desde 1993 hasta 2006 de la mano primero de Jean Chrétien y en el tramo final de Paul Martin, pasaron de 103 escaños en 2006 a 34 en 2011, lo que les relegó a convertirse en el tercer partido del Parlamento canadiense.
El desplome de los liberales en las elecciones de 2011, que obtuvieron el peor resultado de su historia, llevó a pensar incluso en la desaparición del partido y permitió el ascenso del socialdemócrata Nuevo Partido Democrático (NPD), que se ha convertido en el principal partido de la oposición.
El nuevo líder de los liberales tendrá dos años para ponerse al día y reconstruir la maquinaria del partido para poder plantar cara a conservadores y socialdemócratas. Las próximas elecciones generales del país están previstas para el año 2015.
Para muchos liberales, Justin Trudeau es el candidato ideal para que el PL recupere el poder.
Es fotogénico, buen orador, joven y forma parte de una dinastía política que no deja indiferente a ningún canadiense.
Su padre repatrió la Constitución canadiense de Reino Unido, utilizó el Ejército contra los independentistas de Québec, fue amigo de Fidel Castro para desesperación de EE.UU., estableció el carácter bilingüe del país y se enfrentó al oeste de Canadá, donde todavía hoy su nombre provoca fuerte rechazo.
Incluso antes de ser elegido oficialmente como nuevo líder liberal, Justin Trudeau ha provocado un aumento del apoyo al PL.
Según una encuesta dada a conocer el viernes, por primera vez desde 2009 los liberales están por delante de los conservadores en intención de voto.
La encuesta realizada del 4 y el 8 de abril y con un margen de error de 3,1 %, muestra que un 35,4 % de los sondeados votaría por el Partido Liberal mientras que los conservadores de Harper se conformarían con un 31,3 % y el NPD con un 28,3 %. /EFE