AVN
El gobierno del presidente de México, Enrique Peña Nieto, anunció este viernes un recorte en el gasto público federal de 2015 por un monto de 124 mil 300 millones de pesos, lo que equivale al 0,7% del total del Producto Interno Bruto (PIB), que afectará el desarrollo de proyectos de interés social.
De acuerdo con el secretario de Hacienda, Luis Videgaray Caso, la aplicación de esta medida es de carácter preventivo y responde, tanto al cambio que experimenta el entorno financiero internacional, como a la caída en los precios del petróleo.
El monto del recorte incluye reducciones al presupuesto de los proyectos de desarrollo de la estatal Petróleos Mexicanos (Pemex) por 62 mil millones de pesos, de 10 mil millones de pesos al de la Comisión Federal de Electricidad (CFE); y de 52 mil millones de pesos en el gasto de las secretarías de Estado y dependencias del Gobierno Federal, informó Videgaray.
El Gobierno de Peña Nieto decidió emprender la reducción del presupuesto ante el cambio que presentan las condiciones financieras internacionales, la menor perspectiva de crecimiento de la economía mundial y la previsión de que los precios del crudo se mantendrán bajos.
Como parte del recorte presupuestario se decidió cancelar de manera indefinida el proyecto de construcción del tren de alta velocidad para conectar a las ciudades de México y Querétaro, y suspender las obras para instalar un tren de pasajeros que uniría los estados de Yucatán y Quintana Roo, en la Península de Yucatán.
Serán reducidas también las metas de incorporación de nuevos beneficiarios a los programas de pensiones para adultos mayores.
"Estos proyectos se suspenden o cancelan, no solo por el impacto que tendrían en las finanzas públicas durante 2015, sino sobre todo por la presión de gasto público que implicaría en los años por venir a partir de 2016″, sostuvo Videgaray.
Adicionalmente, se prevé una reducción de 10% en el gasto en servicios personales para mandos medios y superiores, una baja de 10 % en plazas de carácter eventual y por honorarios, así como una rebaja de 10% en el gasto del gobierno en medios de comunicación social.