El presidente de Ecuador, Rafael Correa, dijo hoy a autoridades y pobladores amazónicos que fueron a Quito a respaldarlo en su propuesta de explotar petróleo del Parque Yasuní, que los recursos que se originen de esa extracción de crudo ayudarán al país a superar la pobreza.
Al agradecer “desde lo más profundo de mi corazón” a numerosas comitivas de las provincias de la Amazonía ecuatoriana, que se reunieron en los alrededores del Palacio de gobierno, el mandatario dijo que ese respaldo le dice al mundo “que la Amazonía está con la explotación responsable del ITT para superar la pobreza”.
“El imperativo moral es superar la pobreza. Superando la pobreza también cuidamos el medio ambiente", exclamó el gobernante desde una tarima.
"No voy a sacrificar a mi gente, a nuestras familias, a nuestros pueblos ancestrales, a nuestros pobres en el altar de los contaminadores globales", agregó Correa, refiriéndose a los países industrializados que no contribuyeron a su anterior iniciativa de dejar bajo tierra, los campos que hoy propone explotar.
Correa consideró que “es un error subordinar derechos humanos- básicamente una vida plena y sin miseria-, a supuestos derechos de la naturaleza" y pidió que “sepamos tomar decisiones sensatas, responsables, soberanas, sin condiciones extranjeras”.
Los pobladores amazónicos le mostraron su apoyo y le entregaron un acuerdo de respaldo a la explotación “responsable” en el Parque Yasuní, una zona de alta biodiversidad, declarada zona mundial de biosfera.
Indígenas, colonos y autoridades de la región selvática acudieron antes a la Asamblea Nacional y al Tribunal Constitucional, entidad judicial en la que solicitaron autorización para una consulta popular que dirima si se explota o no petróleo del Yasuní.
El presidente de Ecuador solicitó hace tres semanas a la Asamblea Nacional autorización para extraer petróleo del Yasuní, tras dar por finalizada su iniciativa denominada proyecto “Yasuní ITT”.
La propuesta ecológica planteaba dejar sin explotar 846 millones de barriles de crudo a cambio de compensaciones económicas por 3.600 millones de dólares, que no se recaudaron al nivel esperado.
El gobierno ecuatoriano inicio una campaña para concientizar a la población que la extracción del crudo del Yasuní sólo afectará a una milésima parte de su territorio y que significará en cambio ingresos por más de 18 mil millones de dólares. /DPA