El candidato a diputado por el opositor Frente Renovador José Ignacio de Mendiguren solicitó hoy a la Justicia que investigue "de inmediato" una supuesta maniobra para realizar un "golpe civil" contra el gobierno de la peronista Cristina Fernández de Kirchner.
La diputada y candidata a renovar su banca por el frente de centroizquierda UNEN Elisa Carrió aseveró esta semana que se estaba gestando un "golpe institucional" del Partido Justicialista (PJ, peronista) con apoyo de "sectores empresarios" contra Fernández de Kirchner, a quien le restan dos años de mandato hasta 2015.
"Es un tema muy grave. De ser cierto es grave y, de no ser cierto, también es grave", declaró De Mendiguren, ex presidente de la influyente Unión Industrial Argentina (UIA), a la agencia local DyN.
"Ante las declaraciones de Carrió, sobre la posibilidad de que se estuviera trabajando en un golpe civil, concurrí a la Justicia y pedí que se investigue ese supuesto hecho", informó el empresario tras su presentación ante la Fiscalía de la Cámara Federal.
Según afirmó Carrió en declaraciones periodísticas, "hay una parte de la oposición que quiere un golpe civil". "Quieren armar una transición, en la que un miembro del Congreso de la unidad opositora, se haga cargo. Y el candidato es (Sergio) Massa", el líder del Frente Renovador.
La diputada señaló en tanto que De Mendiguren era uno de los dirigentes con "aspiraciones devaluatorias" que estarían buscando un final abrupto del gobierno, en el marco de lo que la legisladora llamó "la guerra por la sucesión" del PJ.
Massa, alcalde de Tigre, se impuso en las primarias de agosto pasado como precandidato a diputado por el Frente Renovador en la estratégica provincia de Buenos Aires, y relegó al candidato kirchnerista Martín Insaurralde a un segundo lugar. Según los sondeos, Massa podría ampliar la ventaja sobre Insaurralde en las elecciones legislativas del próximo 27 de octubre.
La oposición también se impuso en las primarias en otros distritos clave de la Argentina, aunque el Frente para la Victoria (FpV, peronista) oficialista se mantuvo como primera fuerza a nivel nacional, pero con muchos menos votos que en 2011.
Algunos sectores del kirchnerismo denunciaron en las últimas semanas supuestos intentos destituyentes, mientras que la presidenta aseguró que "balas de tinta intentar derrocar gobiernos populares", en un nuevo ataque a la prensa crítica. /DPA