2001.com.ve|Con información en AFP
La Policía Federal y el Ejército brasileño destruyeron este viernes 2 junio en Río de Janeiro unas 4.000 armas, en su mayor parte aprehendidas en 2016.
"Estas armas han sido entregadas por la población a la campaña de desarme, son fruto de aprehensiones e investigaciones policiales (…), muchas de ellas también provienen de empresas de seguridad privada que cerraron y dejaron las armas", dijo el comisario de la Policía Federal Marcelo Daemao.
Las armas aprehendidas pasaron previamente por el departamento de pericia para determinar si están involucradas en alguna investigación policial y si pueden ser utilizadas como pruebas en algún caso.
El material restante será fundido para ser reutilizado, precisó Alexandre Almeida, teniente de la Armada brasileña.
Daemao explicó que debido a la dimensión de las fronteras colectar armas en circulación es un trabajo "difícil".
En los últimos 150 días, tan solo en el estado de Río de Janeiro se decomisaron 250 fusiles, informó el jueves el secretario de Seguridad del estado, Roberto Sá, luego de que en un operativo se interceptaran 60 armas de guerra en la terminal de cargas del Aeropuerto Internacional Antonio Carlos Jobim (El Galeao), que sirve a la región.
Los fusiles AK 47, G3 y AR15 provenían de Miami junto con equipos para piscinas, informó la Policía Civil de Río. Cuatro personas fueron detenidas durante la operación.
La ciudad, que recibió los Juegos Olímpicos hace nueve meses, experimentó recientemente un fuerte aumento de la violencia.
Al borde de la quiebra, el Estado de Rio no consigue pagar a tiempo los salarios de sus funcionarios desde hace meses, incluyendo el de los policías.