Portugal acabó 2013 por tercer año consecutivo en recesión, con una caída del PIB del 1,4 %, a pesar de que la situación de su economía mejoró desde el primer trimestre y ya apunta al crecimiento de cara a 2014.
Según los datos de la estimación rápida de las Cuentas Nacionales divulgados hoy por el Instituto Nacional de Estadística (INE), esta contracción fue menor que la prevista por el Gobierno luso y la troika, que hablaban de un retroceso del 1,8 %.
Portugal sufrió en 2012 el mayor desplome de su economía registrado desde 1975 con un descenso del 3,2 %, debido sobre todo a la ralentización de sus exportaciones y la bajada del consumo privado.
En el ejercicio correspondiente a 2013, el PIB luso sólo cayó en términos trimestrales entre enero y marzo, y encadenó tres trimestres consecutivos de mejora.
De hecho, de acuerdo con las cifras conocidas hoy, Portugal logró entre octubre y diciembre un crecimiento del 1,6 % respecto al último trimestre de 2012, lo que supone su regreso a los números positivos en términos homólogos por primera vez desde 2011.
Este dato mejora notablemente estimaciones como las del BBVA, que pronosticaban un leve crecimiento de apenas el 0,2 % en este mismo periodo.
Detrás de esta evolución positiva se encuentra la recuperación de la deprimida demanda interna que presentaba Portugal en años anteriores, especialmente por el aumento del consumo de las familias, a lo que se suma el crecimiento de las exportaciones, que no han dejado de incrementarse aunque a menor ritmo.
A pesar de que su economía se contrajo globalmente en 2013, el país logró salir de la "recesión técnica" en el mes de septiembre, ya que su PIB creció en el segundo y el tercer trimestre del año en comparación con los tres meses anteriores.
Las autoridades lusas y la troika de acreedores internacionales que le concedió el rescate en mayo de 2011 (Comisión Europea, Banco Central Europeo y Fondo Monetario Internacional) auguran ya para este ejercicio un regreso al crecimiento y pronostican una subida del PIB del 0,8 %.
Portugal se encuentra inmerso en la recta final de su programa de asistencia financiero (que expira en poco más de tres meses) después de tres años bajo el control de los organismos internacionales, un periodo en el que su economía se contrajo un 1,7 % en 2011, un 3,2 % en 2012 y un 1,4 % en 2013. EFE