Centroamérica debe implementar reformas estructurales, aumentar la carga tributaria y controlar la deuda pública para lograr un mayor crecimiento económico, según el análisis del Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE).
"Hay una gran cantidad de reformas estructurales que deben ser analizadas en cada uno de los países para mejorar los indicadores económicos", dijo el economista jefe del BCIE, Pablo Flores, en una entrevista con Efe en Tegucigalpa.
El experto del BCIE señaló que los países centroamericanos deben impulsar "el fortalecimiento de las instituciones, del sistema financiero y políticas macroeconómicas más consistentes" para consolidar el crecimiento de sus economías.
"Esperaríamos crecer más de lo que estamos creciendo ahora, pero eso dependerá mucho de que la economía internacional mejore, ya que Centroamérica es una región que está indexada al contexto internacional", subrayó.
Además, deben implementar reformas en "lo laboral, competitividad, educación y salud" y, además, tienen que promover otras para elevar los ingresos fiscales, agregó.
Panamá es el motor económico de la región con un ritmo de crecimiento del 7,6 % al cierre de 2012; seguido por Nicaragua, con un 4,2 %; Costa Rica y Guatemala, con un 3,5 %; Honduras con un 2,8%, y El Salvador con un 1,6 %, según cifras del BCIE.
La región también, según Flores, debe hacer "reformas en los balances fiscales y en el nivel de endeudamiento", que en 2012 alcanzó unos 68.479 millones de dólares, para garantizar la sosteniblidad.
La región centroamericana debe evitar "endeudarse más de la cuenta", porque ese endeudamiento y el déficit fiscal harán "insostenible" la deuda en el mediano plazo, afirmó Flores.
"La incapacidad de pago" de la deuda pública "tiene un alto precio" para las economías y, además, pone "en riesgo" a los países, añadió tras señalar que gran parte del déficit fiscal es "financiado con deuda".
La deuda de Panamá y Nicaragua representaba el 38,8 % (15.000 millones de dólares) y el 51,4 % (5.412 millones) del producto interno bruto (PIB) respectivo al cierre de 2012, según datos oficiales.
Las deudas públicas de Costa Rica (14.500 millones de dólares) y Honduras (5.917 millones) representaron el 44,7 % y el 35 % del PIB, en tanto que la de Guatemala y El Salvador el 23 % (13.157 millones) y el 60,9 % (14.493 millones), respectivamente.
Centroamérica, que se prevé crezca a una medida del 3,7 % en 2014, gracias al empuje de Panamá, que encabezará el crecimiento regional con un 6,9 %, debe definir políticas para "controlar el nivel de endeudamiento y el gasto corriente".
"Perspectivas económicas para la región en el 2014″, el más reciente informe del BCIE, prevé que Nicaragua sea la segunda economía centroamericana en cuanto a crecimiento, con un 4 % en 2014, seguido por Costa Rica, con 3,8 %; Guatemala con 3,4 %, Honduras con 2,8 %, y El Salvador con 1,6 %.
Flores señaló que Centroamérica ha sorteado de buena manera la crisis económica internacional, pero todavía tiene el reto de aumentar los ingresos para mantener el nivel de gasto público.
Los países deben realizar "reformas fiscales" que les permitan aumentar sus ingresos, afirmó, tras comentar que deben ir acompañadas de acciones para lograr un gasto público más eficiente.
"El 85 % del gasto de cada uno de los países de la región son muy rígidos, es bien complicado tratar de modificarlos", explicó.
Flores enfatizó que Centroamérica debe darle prioridad a mejorar el cobro de impuestos como el de la venta y la renta, en los cuales existen altos niveles de evasión y pocas herramientas efectivas para su recaudación. EFE