El salvadoreño Alfredo Funes se reencontró hoy con sus padres biológicos y demás familiares luego de haber sido desaparecido forzosamente en 1981 durante un operativo militar realizado en el marco del conflicto armado(1980-1992).
El emotivo encuentro entre Alfredo y sus padres, Marina Funes y Raúl Urbina, y demás familiares, se llevó a cabo en la iglesia evangélica del Tabernáculo Bíblico Bautista San Luis, ubicada en el municipio de San Marcos, cinco kilómetros al sur de San Salvador.
"Yo creo que es un milagro lo que ha sucedido (…) siempre pensaba que mi familia había muerto", expresó Alfredo Funes.
La estatal Comisión Nacional de Búsqueda de Niñas y Niños Desaparecidos (CNB) hizo posible el reencuentro, luego de una larga búsqueda y determinar mediante un examen de ADN el parentesco entre Alfredo y sus padres.
Alfredo, hoy de 38 años, tenía cinco años cuando desapareció en el marco de un operativo militar realizado por la Fuerza Armada salvadoreña entre el 21 y el 30 de octubre de 1981 en diversos cantones y caseríos de los departamentos de Usulután (oriente) y San Vicente (centro), detalló un comunicado de la CNB.
De acuerdo con la CNB, Alfredo iba con su abuelo materno cuando los soldados mataron al individuo y se lo llevaron a él, junto a otro niño.
Oficialmente ese operativo se denominó "Operación Envolvente" y fue realizado bajo la estrategia militar de "Tierra arrasada", cuyo objetivo era lograr el total exterminio de la población, la destrucción de sus recursos de subsistencia", añadió.
Sin embargo, la población la denominó como "Masacre de la Quesera", debido a que una gran cantidad de las familias que se refugiaban del operativo en una Hacienda del Municipio de San Agustín, Usulután, era conocida como "La Quesera".
En ese lugar, el Ejército mató a cientos de personas y en ese contexto en diversos lugares aledaños desaparecieron "por lo menos 20 niños y niñas, entre ellos Alfredo", destacó el documento.
Alfredo Funes, a diferencia de otros niños desaparecidos que han sido localizados en el extranjero, siempre permaneció en El Salvador, ya que fue ubicado en San Rafael de Oriente, en el departamento de San Miguel (oriente).
De momento, la CNB ha resuelto 39 casos, de estos catorce se han reencontrado con su familia biológica, seis solo están localizados, trece fueron encontrados muertos y seis casos fueron cerrados.
Asimismo, tiene 128 casos en proceso de búsqueda, detalló el boletín.
La no gubernamental Asociación Pro-Búsqueda tiene registrado cerca de un millar de casos de menores desaparecidos durante el conflicto salvadoreño, de los que más de 200 ya se reencontraron con sus familiares.
La guerra civil en El Salvador dejó unos 75.000 muertos, 8.000 desaparecidos y 12.000 lisiados. EFE
Sábado 24/05/2014