AVN
Se elevó a 8.000 la cifra de fallecidos por el terremoto que sacudió Nepal el pasado 25 de abril y que dejó destruido gran parte de este país del continente asiático.
Los habitantes de Nepal que sobrevivieron a la tragedia se encuentran bajo la amenaza de un brote de cólera y de enfermedades peligrosas, debido a las condiciones de insalubridad, informó el jefe de agua, saneamiento e higiene del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) en Nepal, Antti Rautavaara.
"En Nepal habrá brotes de cólera y otras enfermedades. Es una batalla donde no podremos ganar. Lo único que podemos hacer es minimizar el dolor y la mortalidad", explicó Rautavaara.
En las próximas seis semanas comenzará en Nepal la temporada de los monzones (tipos de vientos que en verano soplan de sur a norte, cargados de lluvia), situación que complicará las condiciones sanitarias en las regiones que sufrieron el devastador terremoto.
En tal sentido, la Organización de Naciones Unidas (ONU) asignará 63 millones de dólares de ayuda para los trabajos de mejora de saneamiento y abastecimiento de agua con el fin de reducir las consecuencias del posible brote de cólera.