Un incendio en una terminal de autobuses ha dejado al menos siete muertos y 20 heridos -dos de ellos en estado crítico- en Corea del Sur, en un nuevo golpe para este país que aún está de luto por los más de 300 fallecidos en el hundimiento del ferry Sewol.
El incendio tuvo lugar alrededor de las 9.10 hora local (00.10 GMT) en un espacio en construcción en una planta subterránea de la terminal de autobuses de Goyang, una ciudad localizada al noroeste de Seúl, informó el cuerpo de bomberos.
Los bomberos lograron controlar el fuego en unos 20 minutos aunque no fue suficiente para salvar las vidas de siete personas que siguen sin identificar y cuyos cuerpos fueron hallados en una zona en construcción en el subsuelo del intercambiador de transporte.
Los heridos, por su parte, fueron trasladados a hospitales cercanos y dos de ellos se encuentran en estado crítico.
Las autoridades sospechan que el incendio se produjo cuando los trabajadores de la zona en construcción realizaban trabajos de soldadura.
El nuevo suceso mortal ha ocurrido en un momento en el que Corea del Sur sigue de luto por los 304 fallecidos que ha dejado el hundimiento del buque Sewol, que tuvo lugar el pasado 16 de abril.
El naufragio provocó un intenso debate en la sociedad y la clase política surcoreanas sobre la presunta ineficiencia de las medidas de seguridad y prevención de accidentes en Corea del Sur, que según la opinión generalizada no están a la altura del elevado desarrollo económico del país.
Tras recibir fuertes críticas, la presidenta surcoreana, Park Geun-hye, pidió disculpas y asumió junto con su Gobierno la responsabilidad de no haber aplicado las normas adecuadas para prevenir desastres, además de comprometerse a crear nuevas leyes de seguridad más estrictas.
En todo caso, el nuevo accidente en la estación de autobuses podría intensificar aún más el ambiente de indignación en el país y provocar más protestas contra el ejecutivo.
La terminal de Goyang es un gran intercambiador de transporte que consta no solo de múltiples dársenas de autobuses sino también de un supermercado, salas de cine y otros espacios de ocio. EFE