El presidente estadounidense, Barack Obama, no visitará, durante su estancia de dos días en Sudáfrica, a Nelson Mandela, ingresado desde el pasado día 8 en un hospital de Pretoria y en estado "crítico" desde el domingo.
Así lo anunció hoy la ministra de Exteriores de Sudáfrica, Maite Nkoana-Mashabane, en una rueda de prensa sobre la visita, el próximo fin de semana, de Obama al país africano.
"En mi país, a mi edad y a vuestra edad, cuando la gente está enferma les dejamos tranquilos para que se recuperen", dijo la ministra a los periodistas, acabando así con las especulaciones sobre una posible visita de Obama al hospital donde tratan al expresidente sudafricano.
"Al presidente Obama le habría encantado ver a Madiba" (nombre con el que se conoce a Mandela en su país), añadió Nkoana-Mashabane, quien dijo que el mandatario estadounidense podría reunirse en cambio con representantes de la Fundación Mandela.
"Él (Mandela) estaría muy decepcionado si supiera que la vida se ha detenido en Sudáfrica (por el estado de su salud)", explicó la canciller, y descartó que la visita de Obama pueda cancelarse por la situación de Madiba.
Barack Obama comienza mañana un gira africana que le llevará, hasta su conclusión el próximo 2 de julio, a Senegal, Sudáfrica y Tanzania.
Obama aterrizará el día 28 de junio por la tarde en Sudáfrica, y está previsto que se reúna con su homólogo sudafricano, Jacob Zuma, el sábado 29, durante su estancia en Pretoria y Johannesburgo.
El 30 de junio, el primer presidente negro de Estados Unidos se desplazará hasta Ciudad del Cabo, en el suroeste de Sudáfrica, y visitará la cercana Isla de Robben, donde Mandela estuvo preso durante 18 años.
Obama pasará por la antigua prisión para "rendir tributo a su extraordinario sacrificio", según la Casa Blanca, y acudirá después a un centro comunitario junto al arzobispo Desmond Tutu, que igual que Madiba luchó contra el régimen racista del "apartheid" y fue nombrado premio nobel de la Paz.
Nelson Mandela, de 94 años, fue hospitalizado el pasado 8 de junio en estado "grave pero estable" por una recaída de una infección pulmonar.
El estado del primer presidente negro de Sudáfrica pasó de "grave" a "crítico" el pasado domingo. EFE