Las aguas residuales continúan siendo un reto para Costa Rica, un país caracterizado por ser referente mundial en el campo ecológico, pero donde solo el 3 % de ese líquido recibe el tratamiento adecuado.
El rezago que se mantiene en materia de saneamiento de aguas se vio reflejado en un ránking reciente de la estadounidense Universidad de Yale y ha hecho que el Gobierno lleve a cabo inversiones en plantas de tratamiento para solucionar el problema a mediano y largo plazo.
"El enfoque ambiental de Costa Rica se ha concentrado más en lo verde y no hay duda que hemos tenido un enorme éxito en este ámbito, haciendo de nuestro país un referente mundial en el campo ecológico, pero ahora debemos atender con el mismo empeño la parte de saneamiento ambiental", indicó el Ministro de Ambiente y Energía (MINAE), René Castro en un comunicado.
Las alarmas en el tema ambiental se encendieron cuando Costa Rica registró un descenso en el Índice de Desarrollo Ambiental (EPI, publicado cada dos años por la Universidad de Yale, Estados Unidos) al pasar del puesto 5 en 2013 al 54 en 2014, entre un total de 178 países.
Sin embargo, a pesar de esos datos, el MINAE indicó que el país no ha "sufrido variaciones abruptas ni tampoco un desmejoramiento" en sus índices ambientales, especialmente en lo que respecta a bosques y biodiversidad.
Según explicó la institución, la caída se debe a la introducción de nuevos indicadores en la medición del índice, incluyendo el tratamiento de las aguas residuales, indicadores de saneamiento ambiental, regulación de agroquímicos y de salud humana relacionados con la calidad del aire.
Con la nueva metodología aplicada, los países más desarrollados tomaron los primeros lugares ya que cuentan mejores tecnologías y financiación.
Un ejemplo de ello es Australia, que estaba en el puesto 48, en 2012, y escaló hasta el tercer lugar, aunque en contraste está el caso de Noruega, que bajó de la posición 3 a la 10 y Francia, del 6 al 27.
En los primeros lugares del ránking se ubican países como Suiza (1), Alemania (6), España (7), Canadá (24) y Chile (29).
Ahora Costa Rica tiene el reto de mejorar en esos nuevos aspectos, como el rezago en el tratamiento de las aguas residuales, para lo que el Gobierno lleva adelante inversiones por cerca de 900 millones de dólares en tres plantas de agua en el centro el país.
El director ejecutivo de la organización no gubernamental Fundación Neotrópica, Bernardo Aguilar, dijo a Efe, que el hecho de que se hayan cambiado los indicadores del EPI ha sido un "jalón de orejas" para ver hacia otras áreas donde "usualmente" no se ve.
"En buena hora que nos llegó esto porque hasta el momento la realidad ambiental que se presentaba era con la que nos sentíamos cómodos y ganadores, porque en aspectos de política verde Costa Rica es un ganador", apuntó Aguilar.
Agregó que "este enfoque más integral ha hecho que tengamos que mirar hacia áreas donde usualmente no le damos tanta importancia, que es donde vivimos".
Para Aguilar, la caída en el ránking da "un jalón de orejas para que veamos y pensemos que ésta es una parte muy importante del ambiente".
El Ministerio de Ambiente y Energía también manifestó que el trabajo debe ser en conjunto con otras instituciones nacionales, entre ellas los municipios, para que inviertan en sus respectivos sistemas de tratamiento de aguas y alcantarillado sanitario.
Dentro de los esfuerzos por alcanzar un entorno más saludable, el Gobierno está construyendo la planta de tratamiento Los Tajos, que impactará directamente en la limpieza de los ríos en el área metropolitana.
La planta, que iniciará operaciones en 2015, tiene un costo de 348 millones de dólares, y beneficiará a cerca de un millón de personas que habitan el Gran Área Metropolitana. EFE