EFE
Un seísmo de magnitud 6,5 sacudió la isla de Nueva Bretaña, en el noreste de Papúa Nueva Guinea, sin que se haya declarado alerta de tsunami o informado de víctimas o daños.
El Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS), que vigila la actividad sísmica en todo el mundo, localizó el hipocentro a 28 kilómetros de profundidad.
El organismo situó la sacudida a 33 kilómetros al noroeste de Kandrian, en el sureste de Nueva Bretaña, y a 451 al noreste de Port Moresby, la capital del país.
El archipiélago de Papúa Nueva Guinea se asienta sobre el Anillo de Fuego del Pacífico, una zona de gran actividad sísmica y volcánica que es sacudida al año por unos 7.000 temblores, la mayoría moderados.
Un seísmo de 7 grados de magnitud golpeó en 1998 el mar de Bismarck, en el este de Papúa Nueva Guinea, y originó una ola gigante que arrasó decenas de aldeas y mató a más de 2.200 personas.