El embajador de Venezuela ante la Organización de Estados Americanos (OEA), Roy Chaderton, dijo que "hay la alternativa cada vez más cierta" del regreso del jefe de Estado, Hugo Chávez, a al país tras ser preguntado acerca de si la situación de salud del gobernante ponía en juego a "la patria".
"Está en juego porque está amenazada (la patria) pero (…) la patria se va a salvar. Hay la alternativa cada vez más cierta del regreso del presidente Chávez", apuntó el embajador.
En los 14 años de gobierno de Chávez, en Venezuela "se ha creado un movimiento, se ha creado una conciencia", dijo.
El presidente venezolano permanece hospitalizado en Cuba desde el pasado 11 de diciembre cuando fue sometido a una intervención quirúrgica para paliar el cáncer que lo aqueja.
Chaderton aprovechó para agradecer al presidente de Panamá, Ricardo Martinelli, por "la manera tan generosa y tan humana como reaccionó" al destituir a su embajador ante la OEA, Guillermo Cochez, quien pidió al organismo el pasado 16 no ignorar la potencial violación de su Carta Democrática por parte de Venezuela.
Chaderton calificó a Cochez de "patán" durante la misma sesión y lo acusó de ser portavoz de la oposición venezolana.
La crítica de Cochez estuvo dirigida al secretario general de la OEA, José Miguel Insulza, quien indicó que respetaba "cabalmente" la decisión tomada por los poderes Legislativo y Judicial de Venezuela de postergar indefinidamente el acto de investidura del gobernante reelegido, hasta que se recupere.
"Se me hacía difícil pensar que no pudiese terminar de la manera como finalmente terminó", dijo Chaderton sobre el desenlace del incidente.
"No estamos obligados a tener malas relaciones con gobiernos que tengan una visión diferente a la nuestra”
Ante la ola de rumores sobre un acercamiento entre Caracas y Washington, el diplomático reconoció que “hay cosas que se están haciendo con mucha seriedad y con mucha cautela”.
Reiteró que es posible tener buenas relaciones mientras se mantenga un nivel de respeto e igualdad: “Nosotros no estamos obligados a tener malas relaciones con gobiernos que tengan una visión diferente a la nuestra”.
A la pregunta por el grado de cercanía entre la Casa Blanca y Miraflores, prefirió responder: “Ni frío ni calor. Cero grados”.
Afirmó que el gran propósito de la política exterior del gobierno venezolano es la libertad. "Lo mismo que hacemos en el ámbito nacional lo hacemos en el internacional. Tratar de que los excluidos participemos, de que haya un espíritu comunitario, democrático (…); lo mismo que tenemos en casa, pero sobre todo ser independientes", señaló. / EFE.