De varios disparos asesinaron a una pareja de esposos de nacionalidad venezolana, dentro de la habitación donde vivían alquilados, en el distrito de Mala, provincia de Cañete, ubicada en el departamento de Lima, Perú.
Las venezolanos respondían a los nombres de Diviana Farías González, de 26 años y Jair Moreno Santos de 25 años.
El homicidio ocurrió la madrugada del lunes 11 de enero, cuando la pareja ingería alcohol en el segundo piso de la vivienda, ubicada en el sector El Pino, según reportó la Policía Nacional de Perú.
De acuerdo a la información publicada por el diario Perú 21, reseña que la pareja fue sorprendida por sujetos desconocidos. Quienes forcejearon la puerta del primer piso para llegar a ellos y le propinaron varios disparos hasta quitarles la vida.
Tras subir las escaleras, los presuntos homicidas ultimaron de varios disparos a los venezolanos. Se supo que los proyectiles impactaron en las cabezas de ambas víctimas.
Horas más tarde, peritos de la Depincri y un fiscal de turno, llegaron al lugar para recoger evidencias. Presumen que por su modalidad se trataría de un ajuste de cuentas.
De testigos a sospechosos
La pareja de peruanos María del Carmen Quiroz Aspajo (29) y Santos Gabriel Villalobos Campos (32), quienes se encontraban en el momento del suceso, fueron intervenidos por policías el lunes 18 de enero. Por ser los principales sospechosos del crimen de los esposos venezolanos Diviana Farías González y Jair Enrique Moreno Santos.
En un inicio, ambos eran testigos del asesinato de los venezolanos, pero conforme pasaron las horas su situación cambió y se acogieron a la colaboración eficaz, es decir, brindar información a cambio de un beneficio en su pena. Ahora la Fiscalía ha dado 7 días de ampliación para la investigación de este doble crimen, indicaron medios peruanos.
Cuando llegaron los policías, ellos se encontraban en la casa y contaron cada detalle del fatal episodio. Se pensó que solo serían testigos, pero se convirtieron en los principales sospechosos.
Las venezolanos llegaron al país suramericano hace dos años. Diviana Farías González trabajaba como secretaria en una notaría y Jair Moreno Santos era mecánico de motos.
La hipótesis del crimen es una venganza y según hay más involucrados en este hecho.
La pareja de venezolanos se casó en agosto del 2020 y tenía planeado ayudar a sus familiares que llegan a Perú para trabajar.
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