Análisis El Nuevo Herald
El 2014 fue un año de volatilidad en Venezuela, con el gobernante Nicolás Maduro enfrentando crecientes presiones políticas, dentro y fuera del país, ante el colapso del modelo petropopulista creado por el chavismo y el incremento de la represión.
Maduro, cuyo mandato comenzó el año anterior con acusaciones de que hizo trampa en el proceso electoral, también vio un acelerado deterioro en el capital político que heredó del fallecido presidente Hugo Chávez, con el margen de popularidad del chavismo descendiendo desde niveles cercanos al 50 por ciento a tramos ligeramente superiores al 20 por ciento.
La incapacidad del gobierno de atender los problemas más básicos de los venezolanos, incluyendo la inseguridad personal, los altos niveles de desempleo, la escasez de productos y una galopante inflación, contribuyeron a alimentar el creciente descontento en torno al régimen.
El clima económico, que ya venía tropezando desde el 2013 por la acumulación de una serie de desequilibrios, se fue agravando en la segunda mitad del año ante la incapacidad del gobierno bolivariano de hacer correcciones que eran urgentemente necesarias. Y la situación empeoró sustancialmente en el cuarto trimestre con una drástica caída de los precios del petróleo, producto básico que genera más del 95 por ciento de los dólares que ingresan al país.
Los precios del crudo venezolano han descendido a cerca de la mitad de los niveles en que se encontraban cuando inició al año, lo que está generando pronósticos de que los problemas económicos del país apenas comienzan.
En el plano internacional, el régimen venezolano también se vio acosado durante el año por denuncias de violaciones de los derechos humanos y de persecución política que comenzaron a ser introducidas ante las instancias internacionales.
Esos informes fortalecieron las denuncias en el exterior de que el chavismo ha terminado por desmontar el estado de derecho y las instituciones democráticas del país para establecer un régimen autoritario, y que hace uso del sistema judicial para encarcelar arbitrariamente a disidentes y opositores.
2014-12-24