Mildred Manrique / [email protected]
El problema para conseguir carne y pollo en los principales supermercados del país persiste. Solo se ven gallina, chuleta, chivo y pernil. Hasta ahora, los venezolanos no han dejado de comer cárnicos.
A algunos no les importa pagar hasta el triple por adquirirlos en algunas carnicerías privadas, y si no les alcanza el dinero van y hacen su cola kilométrica en Abastos Bicentenario.
En un recorrido realizado este jueves por mercados y carnicerías de la Gran Caracas, se pudo constatar que solo en la red pública de alimentos se expenden carne y pollo a precios regulados: cortes de primera en Bs. 220 el kilo, y de segunda Bs. 165 el kilo; mientras el pollo está en Bs. 65 el kilo. La cola, como de costumbre, era inmensa, tanto adentro, para pagar, como afuera del establecimiento, para entrar.
El Gobierno sigue controlando la venta de productos regulados por el terminal de la cédula. lunes 0-1, martes 2-3, miércoles 4-5, jueves 6-7, viernes 8-9 y los fines de semana, sábado del 0 al 4 y domingo del 5 al 9.
En las carnicerías privadas los cortes de res superan los Bs. 300 por kilo. El pernil y la chuleta están entre Bs. 450 y Bs. 600 el kilo. El kilo de gallina está en Bs. 250.
Grandes cadenas de automercados como Excélsior Gama, Central Madeirense, Luz, y Unicasa, entre otros, están desabastecidos completamente de estos rubros.
La situación no sólo ha perjudicado a grandes restaurantes y a familias que están acostumbradas a consumir el alimento. “También perjudica a quienes viven de la venta de comida rápida, como empanadas, arepas y hamburguesas”, comentó José Dugarte, quién tiene un puesto de comida en el centro de Caracas.
“Tengo que pagar más y cobrar más por la comida. Esto no permite aumentar mis ventas. Cuando no es la harina, es el aceite, la mantequilla; si no la carne o el pollo”, criticó el comerciante.
A la gente en la calle se le consultó desde cuándo no comían carne o pollo y la mayoría respondió que “casi todos los días”, los come.
“El atún está incomprable. Una latica cuesta 170 bolívares y eso no alcanza para una familia de tres siquiera”, manifestó Ana Villalobo, una señora que se encontraba en el supermercado Excélsior, de Parque Miranda, en Caracas.
Productos como harina precocida, mantequilla, café, azúcar, leche en polvo y líquida, mayonesa, papel higiénico, champú, atún, lavaplatos, jabón en polvo para lavar, desodorantes y afeitadoras, continúan sin verse en los anaqueles.
2015-05-08