EFE
La Policía regional de Cataluña (Mossos d’Esquadra) trata de confirmar que el autor del atentado en Barcelona huyó con el coche que se saltó un control policial y apareció poco después con su dueño apuñalado, quien entonces sería la víctima número 15 de los terroristas.
El responsable de la policía regional catalana, Josep Lluís Trapero, desveló en una conferencia de prensa que el sábado obtuvieron una información, que calificó de "muy interesante", sobre los movimientos de la persona que conducía ese vehículo.
No obstante, alertó de que aún no han podido confirmar que se trate de Younes Aboyuaaqoub, el terrorista huido que supuestamente conducía la furgoneta que atentó en Barcelona y al que busca toda la policía, aunque reconoció que están trabajando en esa línea.
"Hay que demostrarlo. Cuando estemos en condiciones, si es el caso, lo notificaremos al juzgado", dijo Trapero, que añadió que "cuando se pueda acreditar, tendríamos un cadáver más vinculado a los atentados".
Asimismo resaltó que ninguno de los doce integrantes de la célula contaba con antecedentes por terrorismo ni figuraban en bases de datos sobre terrorismo.
Respecto al coche que se saltó el control policial en Barcelona, el policía explicó que un testigo vio que una persona salía corriendo de ese vehículo, tras abandonarlo.
"Hemos ido obteniendo información. Ya hemos logrado situar el vehículo donde estaba antes de los hechos. Antes del control", desveló.
Pese a que en un primer momento la Policía catalana desvinculó este episodio de los atentados terroristas, la situación se ha modificado con el paso de las horas con las nuevas pistas recabadas por los investigadores, que ya no descartan que pueda estar relacionado con la célula.
El coche sospechoso embistió en la tarde del pasado jueves a una agente de la policía, a la que rompió la pierna por rl impacto, en un control en la avenida Diagonal, una de las calles más importantes de Barcelona y, tras ser tiroteado por agentes de la policía catalana, el coche fue abandonado a unos tres kilómetros.
En el interior del vehículo, los agentes localizaron el cadáver de un cooperante español, de 34 años de edad y vecino de Vilafranca del Penedès (Barcelona).
Inicialmente los investigadores tenían la hipótesis de que el hombre falleció por los disparos de los agentes, aunque la autopsia confirmó su muerte se debió a lesiones con arma blanca producidas con anterioridad.
Según los investigadores, el coche lo conducía una segunda persona, que dejó el vehículo abandonado y se dio a la fuga, y a quien ahora se busca identificar y localizar.
2017-08-20