Zulay Camacaro F | @ZulayCamacaroF
Estilistas aseguran que las barberías y peluquerías no desaparecerán porque existe la necesidad de cortar el cabello. Las peluqueras afirman que bajó la clientela por situación económica más que por la cuarentena y atender en los domicilios les reportan más ganancia.
José Pacheco es barbero y dijo que “ahorita hay peluquerías unisex y las barberías, no creo que desaparezcan, el servicio es diferente y el hombre siempre se afeita. Existirán las dos”.
“Trabajo en un sitio abierto y la pandemia no me afecta, pero a peluquerías sí. Siempre hay clientes y tomo las previsiones. La demanda subió 60%”.
El barbero Mirko Yánez señaló que los locales del ramo podrían disminuir. “Dependerá de la calidad del local. Entró la cultura moderna, atrás quedó el estilismo del barbero y cobraron fuerza las barberías especializadas para hombres, donde le arreglan lo pies, y el delivery”.
Comentó que el trabajo en las peluquerías tradicionales “mermó entre 40% a 50%. La gente busca el centro comercial para salir, en los locales con salida a la calle bajó 80% y otros quebraron”.
Acotó que “me va mejor con delivery, pero es más agotador. Trabajo con un asistente porque hago 12 servicios al día y la gasolina cuesta el 10% de lo que se hace”.
Estilistas
Adelina Vargas indicó que “no ceo que las barberías desaparezcan porque el hombre tiene que afeitarse. En las peluquerías tradicionales disminuyó bastante el trabajo porque la gente no quiere ir al local o no tiene la plata. La demanda bajó 40%.”
Señaló que “ahorita no hago domicilios, por pandemia la gente no quiere llevar a otras personas a la casa. Dan más ganancia porque no tengo que pagar por silla, toda la plata es para mí. Los servicios más solicitados son corte y secado”.
El estilista Omar Vale estima que las barberías no cerrarán, “en un futuro lejano tal vez y serán sustituidas por domicilios. Trabajo por mi cuenta porque las peluquerías están muy vacías, solo 2 o 3 clientes se acercan a los locales por cuarentena y situación país”.
Vale aseguró que “los clientes mermaron y buscan de atenderse con barberos en la calle porque no tienen $3 a $6 para pagar la barbería y cambian el servicio por una harina o un aceite”.
“En la semana radical tengo más clientes porque la gente no quiere salir o sentarse al lado de otra persona, prefieren el domicilio por ser más higiénico”, dijo.
Manicuristas
La manicurista Katherine Carrascal aseguró que “con domicilios se gana más, en un local hay que dejarle un porcentaje a la peluquería. No a todo el mundo le gusta que uno vaya a su casa, y en la calle a uno le pueden robar los materiales”.
Greyska Sánchez indicó que “por los domicilios cobro un poco más porque hay que trasladarse y el transporte público es incómodo por los tiempos de trayecto. Gano más, pero el local es más cómodo y tengo 4 o 5 por día, con domicilios 2 o 3”.
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