María Isabel Rangel | [email protected]
En marzo del pasado año con la llegada del COVID-19 al territorio venezolano el gobierno impulsó la medida “Cada familia una escuela” al cerrar los salones para evitar la propagación del virus. Elianna Nieves, madre de dos niños comentó que siente "que no están aprendiendo nada en casa”.
La mujer de 38 años ayuda a sus hijos de cinco y 10 años, respectivamente, con sus tareas y “hace un esfuerzo” para que aprendan. “No sé nada de pedagogía. Les explicó lo que tienen que hacer, pero no creo que estén ganando conocimiento o al menos no del todo”.
Nieves expresó que se le hace difícil actuar como la maestra de los dos pequeños porque “no estudie para esto, no sé cuáles son los métodos. Hay temas que ni siquiera entiendo”.
Educación a distancia
Asimismo, la ama de casa explicó que su esposo, Antonio Guerrero, es una gran ayuda, sin embargo, tampoco está muy instruido en la educación.
“Los dos hacemos lo que podemos por ayudarlos y explicarles los temas y asignaciones aun así es difícil si ninguno de los dos está especializado para esto”, de esa manera agregó que “por suerte una de las maestras de mis hijos siempre nos está dando consejos de cómo manejar esta situación”.
Otra familia afectada por la educación online es la de Jenireth Rondón quien comentó que su hijo desde el comienzo de la pandemia ha tenido problemas de conocimiento y déficit de atención.
“Mi hijo ya no sabe lo que es ir a clases de manera tradicional”, detalló la mujer de 29 años, por lo cual agregó que “está cursando su tercer nivel de preescolar. Solo logró ir los primeros meses del periodo escolar pasado y estos no fueron suficientes para que él lograra adaptarse”.
“El siente que más que tareas son actividades que le pongo yo, no presta atención y pocas veces ha aprendido de verdad”, afirmó Rondón, quien trabaja como estilista. Agregó que “cada vez es más difícil para mí hacer el papel de profesora”.
Expresó que “me preocupa que una vez volvamos a la normalidad Sebas (su hijo) no pueda adaptarse y eso desate algunos problemas psicológicos en él”, explicó Rondón.
Afirmó que ha contactado a la docente del curso de su pequeño y así buscar ayuda profesional, mientras que por su parte recibe ayuda de una especialista quien la asesora en cómo educar a su hijo bajo la modalidad online.
Ayuda de educadores
Ivette Montero, licenciada en educación especial desde hace meses le ha brindado apoyo a Jenireth Rondón en el caso de su hijo. “Entiendo lo difícil que se ha vuelto para los representantes tomar el lugar de los maestros, especialmente quienes tienen niños pequeños”.
“Siempre me ha gustado ayudar, sobre todo si es educación, pienso firmemente que como profesores tenemos una gran responsabilidad en estos momentos, pero debemos más allá de enseñar a los alumnos, ayudar a los representantes”, explicó Montero.
De igual forma agregó que “muchos docentes que no están ejerciendo su profesión por razones personales asesoran a padres que no tienen conocimientos ni herramientas para educar a sus hijos en casa y eso es muy importante”, por lo que añadió que “todo está en pedir ayuda”.
“Por este tema los padres se encuentran en una situación difícil de manejar, donde sus hijos son afectados”, comentó la docente. Señaló que “el ser educador va más allá de enseñar, hay métodos de aprendizaje, se debe saber sobre pedagogía, es entendible que en casa la educación este en un nivel crítico, porque no todos están calificados para enseñar”.
Dato
El comienzo de clases presenciales estaba pautado para abril del presente año, dado al incremento de casos por coronavirus, el mandatario nacional, Nicolás Maduro decidió que las aulas se mantendrían cerradas hasta nuevo aviso.
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