AP
Hombres armados capturaron el sábado por la mañana al jefe de gabinete del presidente de Yemen en el centro de la capital, Saná, indicaron fuentes de seguridad, en un crudo ejemplo de la inestabilidad que sufre el país más pobre del mundo árabe.
La captura de Ahmed Awad bin Mubarak se produjo mientras Yemen se enfrenta a rebeldes hutíes chiíes, y sufre ataques frecuentes de al-Qaida.
Las fuentes señalaron que bin Mubarak y sus dos guardas fueron atrapados cuando hombres armados detuvieron su coche en el centro de Saná. No se solicitó un rescate, señalaron.
Bin Mubarak, de 46 años, un empresario reconvertido en político que está entre los más jóvenes de la clase política, ganó relevancia durante el alzamiento que obligó a renunciar al veterano líder Ali Abdullah Saleh dentro de un acuerdo respaldado por Estados Unidos.
Las fuentes, que hablaron bajo condición de anonimato al no estar autorizadas a informar a la prensa, dijeron sospechar que los captores eran rebeldes chiíes hutíes. Los hutíes tomaron el año pasado amplias zonas de Yemen, incluyendo Saná, dentro de su larga lucha de poder con el presidente, Abed Rabbo Mansur Hadi.
Sus detractores acusan a los hutíes de ser próximos a la chií Irán, acusación que los rebeldes niegan.
Bin Mubarak está enfrentado a nivel personal con los hutíes. El pasado octubre, él fue el elegido por el presidente para ejercer como primer ministro, pero su nominación descarriló después de que los hutíes se opusieran debido a sus lazos con el presidente.
Por otro lado, el sábado, miles de personas se manifestaron en el centro de Saná contra los rebeldes chiíes, en una protesta convocada por grupos civiles. Marcharon hacia el Ministerio de Defensa, coreando: "¡Revolución contra los hutíes! ¡Revolución contra el terrorismo!".
Una protesta separada ante la embajada francesa reunió a personas que expresaron su indignación por la representación del profeta Mahoma en el semanario satírico parisino Charlie Hebdo.
2015-01-17