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En vísperas del 1° de Mayo, los trabajadores en Venezuela se preparan para una jornada de protesta y no para una celebración, así lo manifestó Mauro Zambrano, dirigente sindical de hospitales y clínicas, quien invitó a los asalariados a manifestar en pro de recobrar las conquistas laborales que se han perdido.
Confía que de esa actividad salga no solo una hoja de ruta para lograr las reivindicaciones, sino también la transformación el país.
Destacó que la situación de los funcionarios es muy mala. "Desde que entró en vigencia la reconversión monetaria, prácticamente aplastaron las convenciones colectivas".
Explicó que el salario mínimo debido a la hiperinflación solo alcanza para comprar un kilo de queso. "Se atenta contra los derechos humanos de los trabajadores".
Zambrano refirió que las condiciones laborales son muy precarias y señaló que en el sector público ningún funcionario tiene las condiciones apropiadas para desarrollar su labor.
"Esto atenta contra los derechos de los trabajadores de ejercer su labor eficazmente. No se tienen las herramientas necesarias. En el caso de sector salud que está en emergencia humanitaria se puede decir que existe un déficit de 90% de los insumos. Los equipos médicos no funcionan tampoco hay existencia de productos para la limpieza", apuntó.
Las consecuencias de esta precariedad, las ubica en el caso de los pacientes que ingresan a los centros de salud públicos que contraen infecciones bacterianas.
"Desde el ámbito laboral realizaremos una marcha, en la cual los trabajadores lleven la batuta de la protesta, porque en vez de darnos beneficios no los han quitado". Puso como ejemplo que cuando se inició reconversión monetaria de Maduro el salario era de 30 dólares. "Nos empeoraron. El salario es entre 3 y 5 dólares, pero peor porque no tenemos las cláusulas de las convenciones".
Detalló que si bien existe nuevo tabulador desde el 12 de abril, este es muy estrecho. "Es una burla para los trabajadores. Un tabulador de manera horizontal tenía un 25% de diferencia en cada escala y la redujeron a 2% y de manera vertical tenía 6% y la redujeron a 2%. La diferencia entre un trabajador de la escala mínima con el de la última no es nada, prácticamente ganan lo mismo".
Explicó que entre el grado 1 y el 10 la diferencia es apenas de Bs 8.000. Por consiguiente, el trabajador sigue con un déficit. "El salario no beneficia en nada, porque la inflación lo devoró".
Criticó que los tabuladores los hayan fijado de manera unilateral, sin llamar a consulta a los sindicatos. "El gobierno hace lo que le conviene, porque le da la gana. Por eso, hoy más que nunca los trabajadores tenemos que estar en la calle para seguir protestando por nuestros derechos y para tener un salario digno como lo dice la Constitución. Esto es un intento más fallido del Gobierno con medidas que no benefician a la clase trabajadora y más bien la perjudica". Descartó que sea una buena medida un aumento de salario porcentual. "Ningún tabulador o convención colectiva sirve con esta hiperinflación cuando no hay estabilidad económica para los trabajadores ni para sus familias. Es por ello, que ejercen diferentes labores para llevar el sustento a su casa. El Gobierno acabó con el trabajo formal por sus malas políticas económicas".
De acuerdo con los cálculos de Zambrano el sueldo debería estar entre 300 y 400 dólares al mes. Cifra que permitiría el acceso a la cesta básica alimentaria.
2019-04-22
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