EFE
En una carta privada a la que Efe tuvo acceso hoy, el Vaticano expresó su "preocupación" por lo poco alentador que han sido los resultados del diálogo del Gobierno de Nicolás Maduro y sus opositores, y pidió que se cumpla con el compromiso de un calendario electoral para una salida a la crisis.
La Santa Sede demanda que "las partes concuerden con el calendario electoral que permita a los venezolanos decidir sin dilaciones su futuro", indica parte de la misiva firmada por Pietro Parolin, secretario de Estado de su Santidad en el documento fechado el 1 de diciembre.
El texto de carácter "confidencial" fue entregado por la Iglesia católica a los delgados del Gobierno de Nicolás Maduro para el diálogo, los de la alianza Mesa de la Unidad Democrática (MUD), el grupo de expresidentes que actúa como mediadores de estas conversaciones, y el secretario e la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), Ernesto Samper.
Parolin manifestó su "dolor y preocupación" en que cuanto ha sucedido hasta ahora desde que se iniciaron las conversaciones el pasado 30 de octubre no le "parece alentador".
"Me refiero en particular al hecho a que estamos asistiendo a un inquietante retraso a la adopción de las medidas necesarias para la aplicación concreta de los acuerdos", indicó sin precisar si con ello se refiere a los compromisos adquiridos por los opositores o por el Gobierno.
El prelado puso como prueba de ello el hecho de que pese a haberse comprometido al respeto y el reconocimiento mutuo, los actores políticos venezolanos continúan haciendo "declaraciones o se toman decisiones que no favorecen el entendimiento entre las partes".
En nombre de la Santa Sede, Parolin demandaba que antes del encuentro que debió celebrarse ayer y que fue suspendido tras acordar entrar en etapa de "revisión", se tomarán "las providencias necesarias para la implementación urgente de medidas destinadas a aliviar la grave crisis de abastecimiento de alimentos y medicinas que esta sufriendo la población".
Para ello puso a disposición sus instituciones para prestar "toda la ayuda posible, con los medios a su alcance para salir de esta situación de emergencia social".
Pide también que "se tomen las medidas necesarias para restituir cuanto antes a la Asamblea Nacional (AN, Parlamento) el rol previsto en la Constitución", esto en vista de que el Poder Legislativo venezolano fue declarado en desacato hace varios meses, y no ha sido restituido en sus funciones pese a sus acciones para poner fin a esto.
El cardenal, que precisa que habla en nombre del papa Francisco, pide también que "se apliquen los instrumentos legales para acelerar el proceso de liberación" de los detenidos que la oposición reclama como "presos políticos".
En tal contexto, la Santa Sede, "cumpliendo su rol de garante de la seriedad y sinceridad e las negociaciones al que ha sido llamada, considera que se debe dar un sustancial paso adelante si se quiere que el proceso de diálogo nacionales desarrolle de manera provechosa y eficaz", añade.
El diálogo político que se inició en Venezuela hace poco más de un mes llegó ayer a una fase de revisión con miras a un relanzamiento a principios del 2017 bajo los exhortos de los acompañantes internacionales que piden prudencia a los voceros del Gobierno y de la oposición.
Los opositores habían anunciado desde las primeras horas del martes que no participarían en los encuentros por la falta de cumplimiento de los compromisos adquiridos por el Ejecutivo en esas conversaciones.
La celebración de unas elecciones presidenciales adelantadas es uno de los principales reclamos de los opositores en la mesa, mientras que Gobierno reclama el reconocimiento como autoridad y fuerza política.
2016-12-07