Jesús M. Gambús [email protected]
El presidente de Colombia Juan Manuel Santos y el líder guerrillero Rodrigo Londoño, alias “Timochenko”, se cayeron como candidatos para el Premio Nobel de la Paz de este año.
El Instituto de Investigación de la Paz en Oslo, Noruega los eliminó en la carrera por la medalla, tras el “no” expresado por los votantes colombianos a los acuerdos que ambos firmaron en La Habana, tras cuatro años de reuniones.
“El resultado de ayer (domingo) supone un golpe terrible para las perspectivas de paz en Colombia”, comentó Dan Smith, director del Instituto de investigación sobre la paz de Estocolmo (Sipri), que también consideraba a Colombia como la gran favorita este año. “Ello hace mucho más improbable un premio Nobel, pero yo no lo excluiría totalmente”, aseguró sin embargo a la AFP.
La derrota del “sí” en el plebiscito por la paz de este domingo en Colombia es responsabilidad directa de Cuba y Venezuela, según observa la dirigencia opositora nacional.
La lluvia de críticas la encabezó el secretario general de la Mesa de la Unidad (MUD) Jesús “Chúo” Torrealba que vio, en el proyecto forjado en La Habana por cuatro año de negociaciones, una derrota castro-chavista.
De haber ganado el “sí”, “hoy habría cadenas y champaña en Caracas y en La Habana”, aseguró, haciendo comparación con el revés del “sí” y la debacle del populismo en la región.
El presidente de la Asamblea Nacional Henry Ramos Allup aclaró que los colombianos “no han rechazado la paz, sino el texto del acuerdo” propuesto por Santos y las Farc. y recomendó, en el nuevo proceso que se abre, “excluir a los cubanos”.
Insólito
La canciller Delcy Rodríguez evaluó el resultado del domingo como “insólito” , como “una cosa que no tiene ningún parangón” (…) “Eso es algo que no puede ocurrir”, puntualizó.
Para la funcionaria, el triunfo del “no” es la expresión de “una minoría” influenciada por una “guerra psicológica”.
No obstante, Rodríguez tiene “total confianza de que en la mesa de negociación se dirimirán todas estas dificultades”, pues “la paz en Colombia es irreversible”.
La ministra de Relaciones Exteriores indicó que en los lugares más afectados por la guerra en Colombia triunfó la opción que representaba el “sí”.
Resaltó, además, que en Venezuela, donde reside un gran número de colombianos hubo respaldo mayoritario a los acuerdos de paz con las Farc.
Revisión
El gobernador del estado Miranda Henrique Capriles Radonsky coincidió con Ramos Allup al recurrir a las redes sociales para subrayar que la paz no se había perdido, sino que el pueblo colombiano había decidido revisar el acuerdo.
Maduro percibió otra cosa en Cartagena
El Presidente Nicolás Maduro aseguró, a propósito de los resultados del plebiscito colombiano, que él apreció “otra cosa” en su reciente visita a Cartagena. ¿Qué pasó con las encuestas?, se preguntó.
El mandatario acusó a los sectores de la oposición de hacer campaña por la guerra, “no por el no”, sino por la guerra, y mostró un ejemplar del Diario 2001 como argumento.
Maduro se preguntó también qué hubiese pasado en Colombia si el resultado de ese “empate técnico negativo” hubiese sido a la inversa, El Jefe de Estado asomó que los partidarios del no, hubiesen cantado fraude.
Finalmente, el Mandatario venezolano suscribió su apoyo al presidente Juan Manuel Santos, y dijo estar listo para seguir apoyando con humildad el proceso de paz, al que también calificó de “irreversible”.
Ganadores y perdedores
El jefe negociador del gobierno colombiano en el proceso de paz Humberto de la Calle puso
su renuncia en manos de Santos, atribuyéndose por completo los errores cometidos.
El exmandatario liberal César Gaviria Trujillo poco aportó al “sí”. Igual revés enfrentó el exjefe de Estado Ernesto Samper.
En la plenaria del senado, Álvaro Uribe se inclinó por una amnistía, siempre y cuando no se hayan cometido crímenes de lesa humanidad, narcotráfico y secuestro.
El exprocurador Alejandro Ordóñez, uno de los grandes críticos del proceso, fue conjuntamente con Álvaro Uribe uno de los propulsores del “no”. En la última semana se unió a él en manifestaciones de calle.
El secretario general de la ONU Ban Ki-moon envió a La Habana, con urgencia, a su representante, Jean Arnault para “consultas”, después de que Colombia rechazara el acuerdo de paz, este domingo.
El expresidente Andrés Pastrana navegó a contracorriente. A pesar de la línea impuesta por el partido conservador, rechazó los acuerdos de Santos y las Farc.
62%
La abstención de este domingo se elevó a 62%, según registros oficiales, lo que indica que unos 21 millones de colombianos permanecieron en sus casas, a pesar de lo “histórico de la consulta”. La abstención es la mayor en los últimos 22 años.
34
34 millones 899.945 colombianos estaban habilitados para votar. Solo 13.053.364 consignaron las papeletas. Se había establecido previamente que 4,5 millones de votos daban legitimidad a la consulta. Un reconocimiento de la apatía electoral.
Comisión de alto vuelo revisará “los peros”
Una Comisión especial de alto nivel, diseñada desde el Ejecutivo colombiano, tendrá tentativamente la responsabilidad de unir criterios políticos en las diferentes fuerzas enfrentadas el pasado domingo, para relanzar los acuerdos de paz rechazados por el electorado.
Los canales de comunicación se abren con amplitud total con el Centro Democrático, la organización que encabeza el expresidente Álvaro Uribe, factor decisivo en los resultados electorales.
El Ejecutivo buscará a toda costa, sentar a sus adversarios en otra mesa de negociación, la que se despliega desde este lunes en la Casa de Nariño, para escuchar los reparos a las 297 páginas que comprenden los acuerdos suscritos en La Habana.
Si bien Humberto de La Calle, jefe negociador del Gobierno en La Habana, puso su cargo a disposición del mandatario, Santos, lo conservó en el equipo.
Lucía lógico “la movida” de Santos, dado que De la Calle ha estado presente en las diferentes fases del proceso que se remonta a 1991, con reuniones con la llamada Coordinadora Guerrillera.
Armando Benedetti, presidente del partido de la U, quien estuvo reunido con Santos y representantes de otros partidos políticos en la mañana de este lunes, confirmó que el primer mandatario mantuvo a De la Calle en el cargo y que la decisión fue apoyada por unanimidad, indicó el diario El Espectador.
El uribismo se da su bomba
El uribismo es el gran vencedor del plebiscito de este domingo, tras morder el polvo de varias derrotas electorales. Hoy, la prensa nacional e internacional resaltan el regreso victorioso del exmandatario Álvaro Uribe Vélez, tras comerse las “verdes”, y ser visto como una alma en pena de la política colombiana.
Su mensaje preciso, pero elevado con pocos recursos, de no dar impunidad a los autores de asesinatos en los 52 años de guerra, conquistó al electorado, desafiando las encuestas.
Uribe, representado en el Centro Democrático, no concurrió ayer a la invitación de la Casa de Nariño, donde el presidente Santos intercambiaría impresiones con las diferentes fuerzas políticas colombianas sobre cómo reorientar el proceso de paz.
No obstante, en un comunicado, el Centro Democrático recordó la intención expresada por Uribe de “apostar a un gran pacto nacional”, propuesto por Santos y subrayó la petición de ese partido de que “se escuchen nuestras razones”.
“Queremos expresar nuestra voluntad de reunirnos con los delegados que el gobierno nacional designe”, dice el comunicado firmado por el excandidato presidencial Óscar Iván Zuluaga, su excompañero de fórmula Carlos Holmes Trujillo y el senador Iván Duque.
2016-10-03