Erick s. González Caldea | [email protected]
El 18 de septiembre del 2016, en horas de la mañana, Johan Manuel González transitaba por la avenida La Armada de Catia La Mar en su motocicleta marca Keeway, modelo Horse, cuando se topó con una alcabala. Allí, dos funcionarios de la Policía del estado Vargas le exigieron que se detuviera y a los pocos minutos se escucharon unos disparos, resultando gravemente herido el motorizado.
Los dos funcionarios que estaban en la alcabala trasladaron a la víctima, en una camioneta particular marca Jeep, hasta la carretera principal de Chichiriviche, donde lo lanzaron por un barranco de la parroquia Carayaca. La moto del hombre la llevaron hasta el muelle del sector La Zorra y la arrojaron al mar.
Los funcionarios Robert Moisés Arévalo, Luiyin José Rodríguez y Euclides Federico Tovar fueron privados de libertad el 23 de septiembre del presente año por el asesinato de Johan, quien en vida laboraba como barbero, sin embargo, las acciones en los puntos de control donde algunos oficiales de seguridad continúan “delinquiendo” siguen presentes en toda Venezuela.
A pesar de ser constantes los robos, extorsiones y hasta asesinatos, muchos de los casos registrados en alcabalas, verdaderas o falsas, no son denunciados por las víctimas, debido a la falta de cultura o de confianza en los entes judiciales para señalar a los victimarios de esos hechos.
En gran medida se ve como los casos de extorsión y secuestro son hechos rutinarios en el país, y lamentablemente se ha constatado que los esfuerzos policiales han sido limitados para detener a estos delincuentes.
Sin confianza.
“Los venezolanos han perdido la confianza en las alcabalas por el simple hecho de desconocer si al llegar al punto de seguridad se convertirá en una víctima del hampa o de los funcionarios”, explicó el criminólogo Fermín Mármol García, quien además considera que la desconfianza también se debe a las zonas donde se instalen las alcabalas móviles, que en muchos casos son lugares con poca luminosidad.
Explicó el especialista que la efectividad de estos puntos de control es menor a 5%, y esto se debe a que ese tipo de operativos no debería aplicarse como rutina. “Las alcabalas funcionan mejor para los cierres territoriales en casos como robo de bancos o secuestros. Del resto son poco efectivas”, sostuvo.
El comisario general Eliseo Guzmán, director de la Policía del estado Miranda, explicó que las extorsiones en las alcabalas existen, pero que los casos registrados son pocos debido a que las víctimas no llegan a denunciar el delito.
En Venezuela no existe una data oficial completa de cuántos ciudadanos han sido víctimas de abuso policial en las alcabalas, debido a la falta de denuncias de estos hechos.
“La data solo se puede medir bajo un tema de percepción ciudadana. Las encuestas de victimización son muy necesarias, pero en Venezuela no se realiza la denuncia formal, y es muy difícil saber si eso existe con certeza”, señaló Mármol García.
Alcabalas falsas
Los casos donde los delincuentes usan unos conos de seguridad, chalecos reflectantes y ropa oscura para asemejarse a efectivos policiales no dejan de ser denunciados en los medios de comunicación venezolanos.
En muchos de los sucesos las víctimas transitaban por zonas poco pobladas, como fue el caso de la ingeniera María Carolina Zamora, de 54 años de edad, quien fue asesinada por dos delincuentes que instalaban falsas alcabalas en una carretera del oriente del país, específicamente a la altura del distribuidor de Píritu, vía Clarines, estado Anzoátegui, donde fue sorprendida, el 13 de septiembre, de este año.
Los hampones colocaron conos en la vía y se hicieron pasar por efectivos de seguridad. Según testigos, usaban uniformes policiales.
A pesar de la gravedad del asunto, al menos otros 15 casos, donde las víctimas han denunciado, se han contabilizados en lo que va de año, según una investigación documental realizada por el equipo del Diario 2001, pero aún faltan denuncias, en los casos de robo, extorsión y asesinatos.
Se hace imperioso que las autoridades pongan orden en el uso de puntos de control policial en el país.
El dato
Expertos aseguran que la efectividad de los puntos de control móviles es menor a 5% cuando tienen más de una hora instalada
15 Casos violentos han sido registrados en las prensas venezolanas en lo que va de año 2016, sin embargo, según informaciones oficiales, la data es mucho mayor, pero por la falta de denuncia no han sido contabilizadas.