Al menos 41 personas murieron en la noche del jueves al derrumbarse un edificio de varias plantas que estaba en construcción, cerca de la ciudad de Bombay, en la costa oeste de la India, informó la policía.
El siniestro causó la muerte de 12 niños, 20 hombres y 9 mujeres. La policía no descarta que más personas permanezcan sepultadas bajo los escombros. Muchas de las víctimas eran trabajadores migratorios.
Según la policía, 69 personas heridas fueron hospitalizadas. Varias de ellas se encuentran en estado crítico.
Funcionarios gubernamentales dijeron que el edificio, de siete plantas, se construyó sin los permisos requeridos. Cuatro plantas ya estaban ocupadas, según la policía, y los obreros estaban trabajando en la construcción de una octava planta.
El ministro de Trabajo del estado de Bombay, Ganesh Naik, dijo a la prensa que las siete plantas se construyeron en sólo seis semanas, lo que explica "la mala calidad de la construcción". Naik agregó que el edificio se levantó sin un arquitecto o un asesor en cuestiones estructurales.
La policía presentó una demanda por homicidio culpable contra el constructor, quien se dio a la fuga.
El derrumbe de edificios no es algo excepcional en las ciudades indias, donde muchas veces se levantan construcciones sin permiso, con malas técnicas de construcción y con material de mala calidad.
Más de 60 personas murieron en noviembre de 2010 al derrumbarse un edificio residencial de varias plantas en Nueva Delhi. /DPA