Jheilyn Cermeño
El pasado lunes 4 de abril a través de las redes sociales y teléfonos celulares se conoció la historia de un hombre que fue golpeado y quemado en plena avenida Francisco de Miranda a la altura de Los Ruices, cerca del metro.
El hecho se registró a las 9:45 de la mañana, cuando Roberto Josue Flores Bernal de 42 años se dirigía a su trabajo, y hampones atacaron a un señor para despojarlo de sus pertenencias.
Bernal fue brutalmente golpeado y rociado con gasolina por una turba que se encontraba en la zona, luego que los antisociales gritaran que "era un ladrón".
Este jueves sus familiares acudieron a la morgue de Bello Monte para retirar su cadáver, explicaron que no era un ladrón y que su pasión era la cocina. “Él era un inocente, Dios le permitió contar lo que pasó ante de morir. Al parecer los mismos delincuentes que robaron a la persona que trataba de ayudar lo acusaron y por eso lo atacaron. Él iba a su trabajo, era chef de cocina, tenía solo una semana laborando en un local en el sector”, refirió Teresa Bernal, tía de la víctima.
Indicó que Roberto pedía piedad que no lo mataran. "Era muy noble. Incluso se ve en el video que hubo gente que lo ayudó. La dueña del kiosko que estaba a un lado de donde ocurrieron los hechos”, añadió.
Bernal detalló que Roberto fue llevado hasta el Hospital Dr. Domingo Luciani, presentaba quemaduras de segundo y tercer grado en al menos 70% de su cuerpo; además de fractura de cráneo. Fue trasladado hasta el Pérez Carreño donde murió a las 9:00 de la mañana del miércoles.
Su cuñada Nubia Figuera, lamentó el hecho y exhortó a no repetir estos actos. “Esta violencia se tiene que acabar, no podemos atacar a la gente en las calles porque alguien lo esta acusando de algo”, expresó.
Roberto vivía en la carretera Petare-Santa Lucía, en el km 8. Además laboró cuatro años con el Ministerio de Alimentación también en el área de la cocina; y padre de cuatro hijos.