Redacción 2001.com.ve / LEHR
La violencia en la familia es una de las más lamentables realidades de la cual no escapa la sociedad venezolana, menos cuando esta valnera la sensibilidad humana de las personas, llevándolas a cometer los más desastrosos crímenes, como el asesinato de un niño, golpes de la vida que en este caso le tocó sufrir a un “chamito” de Maracaibo.
El pequeño David Cuello, falleció la madrugada del lunes a consecuencia de los múltiples traumatismos que sufrió, luego de que su progenitor lo golpeara salvajemente con un palo.
El hecho se registró en la calle 99R del sector Sol de Maracaibo, lugar donde residenciaba el menor desde su nacimiento.
A pesar de que los galenos del Hospital Materno Infantil del sector Cuatricentenario, intentaron salvarle la vida, el pequeño no soportó las hemorragias internas causadas por los golpes, que en su mayoría afectaron su zona craneal.
De acuerdo con el reporte médico, el niño trató de luchar por vivir durante ocho días, pero la madrugada del lunes su situación se complicó por convulsiones febriles que amilanaron su corazón.
Trascendió que para el momento de su sepultura, la comunidad Sol de Maracaibo, asentado en la parroquia Francisco Eugenio Bustamante, al oeste de la capital zuliana, lo despidieron con mucho dolor; tristeza que se reflejaba en las miradas de los que en algún momento compartieron con “el niño de los mandaitos”.
Para el no hubo un ¡Feliz Día del Niño!
Vecinos de la comunidad aseguran que el niño era juguetón y muchas veces retraído, “mirada que quizás se perdía en el horizonte, recordando las violencias de las que era sujeto”.
“David sufrió constantes maltratos Tanto el padre, como la madre, solo le dieron sufrimientos”, aseguraron con lamento los vecinos del niño. Quienes indicaron que la progenitora lo abandonó cuando apenas él era un bebé y se fue a vivir a Ciudad Bolívar.
“Él le tenía mucho miedo a su padre, tanto así que últimamente no salía a jugar con los compañeritos del barrio para no recibir más golpes. Antes era muy alegre e hiperactivo, pero últimamente estaba apagado y cabizbajo”, dijeron.
El victimario quedó identificado como Deivis Antonio Cuello Barrios fue detenido por funcionarios del CICPC y puesto a la orden de la Fiscalía 33 con competencia en menores de la referida jurisdicción.
Tras investigaciones se descubrió que en la residencia también se electrocutó otro hijo del agresor, quien presuntamente se quedo pegado al cable del ventilador de su cuarto y pereció por descarga eléctrica. Caso que se registró en el año 2012.
2015-07-22