EFE
El ministro de Interior, Justicia y Paz, Miguel Rodríguez, dijo que las protestas antigubernamentales que desde hace mas de un mes se desarrollan en el occidental estado Táchira fueron asumidas por bandas organizadas y que los estudiantes que las comenzaron fueron relegados.
"Ya no existen estudiantes y el control lo han asumido delincuentes comunes pertenecientes a bandas organizadas que ahora ponen en riesgo la vida de los vecinos en esos sitios", señaló Rodríguez durante el acto de clausura de la Conferencia de Paz del Táchira que se desarrolló en su capital, San Cristóbal.
Venezuela vive un clima de protestas desde hace un mes que ha dejado más de una veintena de muertos, centenares de heridos y más de un millar de detenidos.
Debido a las protestas, el presidente, Nicolás Maduro, ha convocado a estas conferencias de paz con la intención de buscar una solución a través del diálogo entre todos los sectores de la sociedad, idea que la oposición ha rechazado por no creer en la sinceridad del llamado.
Estas manifestaciones están siendo especialmente virulentas en Táchira y sobre todo en San Cristóbal, donde extensas zonas de la ciudad están vetadas a las fuerzas de seguridad con barricadas y permanecen bajo control ciudadano como medida de presión.
El titular de Interior señaló que llegó a esta conclusión tras reunirse durante la Conferencia con diversos sectores de la sociedad tachirense lo que le permitió tener un "diagnóstico claro" de lo que sucede en esta parte del país.
"Sin duda alguna San Cristóbal está sufriendo las consecuencias de un plan con claros fines insurreccionales para alcanzar un objetivo político: el poder", afirmó.
"Teniendo claro que muchos han participado en el plan sin conocer el objetivo real del mismo e inclusive sin saber claramente quien lo lideriza", señaló.
Indicó además que gracias a información de los mismos vecinos de las zonas conflictivas "sabemos que existen armas de fuego, drogas y alcohol" elementos que, a su juicio, "conforman un coctel que atenta directamente contra la vida de quienes por alguna razón hoy les apoyan".
Reconoció que los tachirenses tienen razones para protestar por situaciones que afecten a su calidad de vida pero dijo "no entender" los métodos aplicados "para hacerse escuchar".
"Siento que algún sector muy pequeño de la sociedad tachirense está como aquellas personas que se toman un frasco de veneno y se sientan a esperar a que su enemigo fallezca", expuso.
El ministro celebró que se llegase a un acuerdo entre las partes partícipes en la conferencia de paz para instalar una mesa multidisciplinaria de carácter permanente en este estado lo que permitirá "hacer del diálogo una política".
Jueves, 13/03/2014