Redacción 2001.com.ve / LEHR
En horas de la mañana de este martes, Luis Carlos Presilla Navarro de 27 años, se subió en un árbol de mango con la intensión de alcanzar unas frutas y terminó electrocutado, tras tocar con un tubo metálico que utilizó para golpear los racimos, una guaya de alta tensión eléctrica que rosaba con las ramas.
El hecho ocurrió en una finca que cuidada el exánime, ubicada en el sector Discovery, específicamente en la avenida Cruz Peraza de la ciudad de Maturín.
Familiares y vecinos de la víctima fatal aseveraron que cuando escucharon el grito del hombre y presenciaron el apagón producido por el corto circuito, salieron a la calle y miraron el cuerpo de Presilla tendido en la tierra con el tubo a un lado.
Afirman que el fallecido era de buen comportamiento y deja un hijo menor de edad en estado de orfandad.
El cuerpo fue trasladado a la morgue del Hospital Universitario “Dr. Manuel Núñez Tovar”, por una comisión del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc), subdelegación Monagas.
Con información de La Prensa de Monagas
2015-07-22