Joan M. Camargo R.
Un abogado de 53 años con movilidad reducida fue torturado y asesinado por choros que ingresaron a su vivienda a robarlo. El hecho ocurrió la madrugada de domingo en el sector Rancho Grande, de la parroquia La Pastora.
El cuerpo de Florencio Figueroa Dávila (53) fue hallado por su prima Delia Figueroa. Yacía en su cama con una herida en la cabeza (lo golpearon con un objeto contundente), una funda en la almohada sobre el rostro (también lo asfixiaron) y sin las uñas de las manos.
Los choros ingresaron por un boquete que hicieron en el techo de la vivienda. A la víctima la despojaron de su cartera, un bolso donde guardaba el dinero en efectivo y dos chequeras que nunca usaba.
Familiares presumen que la víctima fue torturada con la finalidad de que diera las claves de sus tarjetas.
Su prima lo vio por última vez el sábado en la tarde cuando fue a ayudarlo en labores del hogar, debido a que el abogado no podía movilizarse bien, a causa de una Poliomielitis que le atrofió las piernas.
En vida
La víctima vivía sola debido a que su esposa sufría de esquizofrenia. Trabajaba como abogado del Servicio Autónomo de Registros y Notarías de Guarenas. Dejó un hijo de 25 años, que se fue del país hace tiempo en busca de un mejor futuro.
Familiares piden justicia.
2017-03-07