El Alzheimer es una enfermedad que causa el deterioro progresivo de la memoria, el pensamiento y otras habilidades cognitivas. Mayo Clinic define esta enfermedad como el proceso biológico que comienza con la aparición en el cerebro de una acumulación de proteínas en forma de placas amiloides y ovillos neurofibrilares, que hace que las neuronas cerebrales mueran con el tiempo y el cerebro se encoja.
Mientras que la Inteligencia Artificial, la define como la forma más común de demencia en personas mayores.
Esta enfermedad no tiene cura, pero expertos recomiendan mantener un estilo de vida saludable, que incluya hacer alguna actividad física con frecuencia, mantener la mente activa, controlar los factores de riesgo cardiovascular y mantener una dieta equilibrada, como manera de prevenir esta enfermedad.
Haciendo mención específica a la alimentación, estudiosos de la materia, sugieren el consumo de alimentos ricos en omega 3, vitamina K y ácido fólico, ya que estos son fundamentales para el fortalecimiento de la memoria y el desarrollo neuronal en general, es decir, estas vitaminas presentes en algunos alimentos potencian el desarrollo cerebral.
¿Cuál es el papel de la alimentación en la enfermedad del Alzheimer?
Muchos estudios sugieren que los alimentos ingeridos afectan la capacidad del cerebro para pensar y recordar durante el envejecimiento. Es decir, una dieta específica puede aumentar el consumo de nutrientes específicos que protegen el cerebro mediante propiedades antiinflamatorias y antioxidantes, que pueden inhibir los depósitos de beta-amiloide, presentes en el cerebro de las personas con Alzheimer, o mejorar el metabolismo celular, protegiendo así contra la enfermedad.
Cabe destacar que, aún se necesitan más investigaciones las cuáles determinen si realmente lo que se come puede prevenir o retrasar el Alzheimer o el deterioro cognitivo relacionado con la edad, describe el sitio web National Institute on Aging.
Sin embargo, mientras se estudia el caso, nutricionistas sugieren incluir determinados alimentos por sus bondades sobre la salud cognitiva.
¿Qué incluir en la dieta?
Refiere el sitio web El Cronista, que el alimento que no debe faltar en la dieta es la remolacha, una hortaliza considerada un superalimento rico en vitaminas, minerales, fibra y antioxidantes; que estimula las funciones del lóbulo frontal, la región cerebral asociada con la memoria y la toma de decisiones.
Por otra parte, evidencias científicas señalan que esta hortaliza además de ser nutritiva, promueve la dilatación de los vasos sanguíneos hacia el cerebro, facilitando así su funcionamiento.
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