La doble limpieza facial consiste en realizar dos pasos de limpieza consecutivos para lograr una purificación profunda y completa del rostro. Es una técnica de cuidado de la piel, originaria de Corea del Sur, que se ha popularizado en muchas rutinas de skin care. ¿La conoces? Te la explicamos.
Dos limpiadores con distinto propósito
La doble limpieza busca eliminar todo tipo de impurezas de la piel que es imposible eliminar con un mismo producto. Para ello, se hace la limpieza con dos productos diferentes, de la siguiente manera:
Limpiador de base oleosa o con aceite
El primer paso se enfoca en eliminar las impurezas solubles en grasa, como el maquillaje (especialmente el de larga duración y resistente al agua); el protector solar; el exceso de sebo y la contaminación ambiental.
Para esto, se utiliza un producto con base de aceite (aceite limpiador, bálsamo limpiador o agua micelar bifásica) que se aplica sobre la piel seca y se masajea suavemente. El aceite disuelve eficazmente estas sustancias, permitiendo su fácil remoción. Luego, se enjuaga con agua tibia.
Limpiador de base acuosa
Una vez eliminadas las impurezas oleosas, el segundo paso se centra en la limpieza de las impurezas solubles en agua, como el sudor, las células muertas y los residuos que puedan haber quedado del primer paso.
Para esta segunda fase, se utiliza un limpiador de textura acuosa, como un gel, una espuma o una leche limpiadora, que se aplica sobre la piel húmeda. Este paso asegura que la piel quede completamente limpia, sin dejar residuos ni sensación de tirantez.
¿Por qué es tan importante?
La doctora Dra. Alicia Barreiro dermatóloga clínica, cosmética y estética explica que doble limpieza va más allá de un simple lavado facial. Destaca que su importancia radica en los múltiples beneficios que aporta a la piel:
- Limpieza profunda y eficaz de todo tipo de impurezas (tanto las de base grasa como las de base acuosa), previniendo la obstrucción de los poros y la aparición de imperfecciones como acné, puntos negros y granos.
- Mejora la eficacia de los productos, permitiendo que los sueros, cremas hidratantes y otros tratamientos que se aplican a continuación penetren mejor y sean más efectivos.
- Previene el envejecimiento prematuro, al eliminar los agentes contaminantes externos y proteger la barrera cutánea.
- Equilibra la piel, si se eligen los productos adecuados, ya que se controla el exceso de grasa en pieles mixtas o grasas sin resecar las áreas secas.
- Prepara la piel para la rutina de mañana y noche.
La clave de la doble limpieza es elegir los productos adecuados para tu tipo de piel y ser constante. Así, no solo obtendrás mejores resultados a la hora de aplicar tratamientos de cuidado en tu piel, sino que ayudarás a mantenerla libre de imperfecciones.