Aceptar tu propio cuerpo con satisfacción y alegría ayuda a que te sientas en paz contigo mismo y con la vida, es un acto de amor propio que favorece el bienestar físico y emocional.
Cuando las personas aprenden a amar su cuerpo o por lo menos aceptan y respetan lo que tienen, comienzan a tomar decisiones saludables que ayudan a mantenerse en forma.
En tal sentido, querernos por dentro y por fuera nos enseña a aceptar nuestros defectos y con ello aumentamos la autoestima.
¿En qué consiste aceptar tu propio cuerpo?
Es reconocer y respetar sus capacidades en lugar de fijarse en los defectos físicos que puedan o no existir.
Es decir, es clave escuchar cuáles son sus necesidades y lo que hace por ti cada día, en lugar de intentar cambiar cosas para hacer que luzca lo mejor posible.
Para ello, opta siempre por vestirte con lo que te hace sentir bien, evita juzgarte, y realiza la actividad física que mueva tu cuerpo de forma que te sientas bien.
De igual manera, aliméntate bien, pero sin obviar darte un gusto de vez en cuando, siéntete libre de consumir alimentos sabrosos y que te llenen de satisfacción.
Además, elógiate por tus objetivos alcanzados y por todas tus virtudes, como tu buen humor, amabilidad, responsabilidad, etc.
Finalmente, y no menos importante, agradece todo lo que tienes, como eres y todo lo que puedes lograr gracias al cuerpo que el creador te dio.
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Beneficios
Al aceptar tu propio cuerpo aumentas tu autoestima, te vuelves más amigable, respetuosa, amorosa e independiente.
Incluso, comienzas a trabajar en el crecimiento personal, y la salud tanto físico como mental.
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2023-11-08
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