Cada 30 de octubre se celebra el Día Mundial del Fisicoculturismo, una fecha que reconoce el esfuerzo y la dedicación de quienes practican este deporte que combina la fuerza, la resistencia y el control de la musculatura. Para conocer más sobre los secretos de esta actividad física, conversaremos con el entrenador Alberto Soler.
Según Soler, lo primero que hay que considerar al programar un entrenamiento es la edad, el nivel de entrenamiento (principiante, intermedio o avanzado), el objetivo físico que quiere lograr el asesorado (bajar de peso, subir masa muscular, definición muscular, acondicionamiento físico, etc.), si ha tenido alguna lesión, si tiene alguna patología o si ha sido sometido a una intervención quirúrgica. Estos factores determinan la división muscular de la semana, el sistema de entrenamiento a utilizar y la capacidad de recuperación individual del deportista.
Además, señaló que el entrenamiento debe adaptarse a las necesidades específicas de cada deportista, debido a que no es lo mismo entrenar a un boxeador que a un futbolista, por ejemplo. En este sentido, hay que buscar potenciar o mejorar las capacidades físicas que requiere cada disciplina deportiva.
El también fisicoculturista indicó que un atleta tiene necesidades especiales que demandan mayor cantidad de calorías, nutrientes y suplementos. “Sin una buena nutrición y suplementación, el cuerpo no va poder recuperarse de los entrenamientos y por consiguiente no va progresar en el objetivo físico planteado, ya que el cuerpo necesita de esos nutrientes para reparar tejidos como lo es la síntesis de proteínas. Así que sin ello no hay resultados”, comentó.
Soler recomendó seguir una dieta equilibrada y personalizada, así como consultar con un profesional antes de consumir cualquier producto. Además, para prevenir el sobre entrenamiento y las lesiones, compartió consejos prácticos: hacer una buena ejecución de los ejercicios, utilizar un volumen de entrenamiento adecuado a la recuperación individual, no utilizar pesos excesivos sino los que el músculo pueda controlar, no exceder los cinco días de entrenamiento por semana y dormir ocho horas diarias.
“La idea es llevar el músculo a una máxima contracción e hipertrofia, pero hay límites individuales. Cuando una persona siente el músculo bien trabajado con el entrenamiento previamente planificado, no es necesario seguir más allá porque de ahí viene el sobre entrenamiento. Así que no pensemos que más es mejor. El cuerpo da señales y hay que escucharlas. Si sientes que ya no puedes continuar con el entrenamiento, debes dejarlos hasta ahí, las condiciones irán mejorando con el tiempo”, aconsejó.
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El poder de la mente… en todo
El entrenador aseguró que el factor psicológico es de suma importancia en el deportista, debido a que como cualquier ser humano, pasan por muchas emociones durante toda la vida y ello puede afectar el rendimiento y la preparación física. Agregó que las personas no siempre se levantan con la misma motivación o con la misma energía para entrenar y seguir la dieta.
“Es ahí cuando la fortaleza mental y la determinación nos da ese empuje para seguir. Entonces podemos decir que la salud mental es de suma importancia para el buen desempeño del atleta, ya que no estar bien en este aspecto va a limitar completamente la preparación física, llegando al punto de desistir totalmente del entrenamiento. Así que ser atleta o deportista de alto rendimiento, o una persona que quiere iniciar una actividad física regularmente, también depende de la salud mental”, destacó.
En cuanto a la estética en el fisicoculturismo, explicó que lo que se busca es lograr la simetría y la proporción entre las diferentes partes del cuerpo. Para lograrlo, hay que trabajar la amplitud de la espalda, los hombros, la cintura pequeña y las piernas con buena estructura muscular. Todo ello acompañado de un porcentaje de grasa bajo y seco.
Cómo prepararse para una competición
Además de estos consejos generales para mejorar el rendimiento y la estética en el fisicoculturismo, Soler resaltó algunos tips para prepararse para una competencia. De acuerdo a su experiencia, lo primero que hay que hacer es armar un plan de entrenamiento periodizado. Esto significa dividir el año en diferentes fases o ciclos según los objetivos específicos que se quieren alcanzar.
Por ejemplo, si es un deporte como el baloncesto se deben hacer dos periodos: uno de potenciar las capacidades físicas y otro de pre-competencia en donde se mantienen las capacidades para los campeonatos. En el caso del fisicoculturismo, sería un período de volumen o estructuración muscular, y otro de definición muscular y secado. Entonces, dependiendo de cada período, el entrenamiento y la dieta se adaptan a las necesidades del deportista. Indicó que en la planificación está la clave en prepararse para una competencia.
Quienes desean comenzar a prepararse para un campeonato, deben tener estos aspectos claves que precisó: “Primero que lo hagan por pasión, ya que se va a necesitar mucha motivación. Si es fisicoculturismo, que ubiquen una categoría que los beneficie según su genética. Que tengan disciplina y determinación para afrontar los retos que requiere una preparación física para competir. Nunca fallar en la dieta, ya que se está en un ámbito competitivo donde todos dan lo mejor de sí y cada día cuenta. Y que disfruten cada etapa, ya que de eso se trata vivir la experiencia de ser atleta. Es algo único”.
Para Soler, lo que más le apasiona de su trabajo es ver progresar a sus asesorados. Cuando sus atletas están en la tarima, es como si él estuviese montado también y le emociona muchísimo ver en ellos y ellas el resultado de tan arduo proceso. Cada vez que muestra un cambio físico en su cuenta de Instagram, lo ve miles de veces. Le da mucha satisfacción.
Por Wanda López Agostini
Fotos Cortesía
Coordenadas: @Albertossoler
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2023-10-27
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