Un amuleto de protección es un objeto que brinda resguardo y seguridad en diferentes aspectos de la vida.
Existen infinidad de ellos, pues desde la antigüedad han sido utilizados tanto para alejar las energías negativas, como para atraer la fortuna, la suerte y el amor. Incluso, muchas personas toman objetos personales a los que le tienen mucha fe, los catalogan como mágicos y los utilizan cuando se necesitan sentir seguros, por ejemplo.
Si eres una de estas personas que cree ciegamente en los amuletos y talismanes, te enseñamos cómo elaborar uno en el que impregnes toda tu buena energía y así obtener un mejor resultado.
¿Cuál es el mejor amuleto de protección?
A nivel de astrología, se manejan diferentes amuletos según cada signo zodiacal, por ejemplo. Pero, además, basado en la necesidad o el objetivo concreto que se desea conseguir, se puede escoger uno en particular.
Los más comunes son: la estrella de cinco puntas, el yin yan, el ojo turco, la Mano de Fátima, el trébol de cuatro hojas, la turmalina negra y las gemas de protección.
Además, estos objetos sagrados se utilizan también en el Feng Shui para proteger el hogar de las malas energías y promover la armonía y bienestar en los diferentes espacios.
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Tu propio talismán
Realiza tu propio amuleto de protección enfocándote en qué deseas conseguir con ello. Para elaborarlo necesitas un envase pequeño de vidrio con tapa, hojas de romero seco, hojas de lavanda seca y sal negra o blanca. Una vez tengas todos los elementos a la mano, introdúcelos en el envase y finalmente tapa. Puedes tenerlo en un lugar especial en la casa, en la oficina o incluso llevarlo siempre en la cartera.
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Cada uno de estos elementos poseen propiedades que fomentan la protección y la limpieza energética.
No obstante, su eficacia radica en la intención y la creencia con la que se prepara y se utiliza.
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2024-07-04
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