Tener talones resecos es muy común, sobre todo en las mujeres. El simple hecho de utilizar sandalias, u otro zapato descubierto, hace que el contacto de nuestra piel con el aire, los reseque aún más.
Por ende, las mujeres latinas, o que viven en lugares de clima templado, son más propensas a tener talones resecos. Mientras que las mujeres que viven en países donde se presentan las cuatro estaciones, el verano se convierte en todo un dolor de cabeza, o de pies.
Pero ¿qué pasa cuando la resequedad llega al extremo de agrietar nuestra piel? Para estos casos extremos existen soluciones, que en poco tiempo verán su piel tersa y recuperada por completo.
No solo la falta de hidratación en nuestros pies acarrear una piel reseca, al extremo de agrietarse. La falta de omega 3 y zinc, también son factores determinantes de esta condición.
Hidrata tus talones
Para los casos excesivos de presentar talones agrietados, lo ideal es aplicar una hidratación extrema para contrarrestar la falta de humedad en la piel. Claro está, que lo ideal es mantener una hidratación constante para evitar llegar a estos extremos y mantener la piel tersa y suave.
Pero si tu caso ya llega a la piel agrietada por la resequedad, a continuación te mostramos como puedes elaborar tu propia crema hidratante para pies.
Combinar glicerina con limón y bicarbonato, es una combinación poderosa para tratar la resequedad.
Esto gracias a que la glicerina posee propiedades hidratantes maravillosos. Pertenece a un tipo de agentes hidratantes, que son capaces de atraer y retener la humedad.
Para hacerla, solo debes mezclar agua, zumo de limón, glicerina y bicarbonato de sodio, mezclar bien, y sumergir tus pies en esta composición por 20 minutos. Pasado el tiempo, pasa una lima o piedra pómez por la piel seca para retirarla. Si notas que la piel sigue un poco dura, vuelve a sumergir tus piel hasta que la piel ablande.
Pero esta mezcla es tan noble, que si no posees el tiempo para darte este baño de pies, simplemente mezcla los ingredientes si el agua. Te quedará una crema espesa que podrás colocar como crema en tus talones.
Una vez puesta, podrás colocarte las medias sin problemas y dejar que la crema haga su trabajo. Lo ideal es usar esta crema hidratante en las noches. Te lo colocas antes de ir a la cama y duermes con las medias puestas para que actúe durante toda la noche.
A la mañana siguiente podrás lavar tus pies como de costumbre y retirar la piel muerta, ya suave, con una esponja. Puedes repetir este procedimiento durante una semana para obtener resultados efectivos de forma rápida.
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