Envejecimiento facial, algo que no se puede evitar, ya que viene con los años, pero lo que sí podemos realizar es retrasarlo.
Siempre que hacemos ejercicio nos centramos en tonificar nuestro cuerpo, pero rara vez nos preocupamos por tonificar nuestro rostro. A partir de los 20 años de edad deberíamos comenzar con nuestros ejercicios faciales para prevenir el envejecimiento.
Para comenzar, se pueden realizar la rutina facial dos veces por semana, pero a medida que avanzamos, podemos incrementar el número de días, y lo ideal es realizar tu rutina antes de acostarte, de esa manera relajaremos toda la tensión acumulada durante la jornada diaria.
Sin envejecimiento
Colocas la yema de tus dedos en la parte superior de tus cejas y en 15 repeticiones subes y bajas tus cejas. Según como te sientas, puedes aumentar las repeticiones a 50.
Doble mentón
Para ejercitar y reafirmar esta zona solo debes colocar tu mano debajo de los músculos de la barbilla, y manteniendo la mano en el lugar, estira hacia delante y hacia arriba. También, en esta misma posición, intenta abrir la boca de forma suave manteniendo por dos segundo y relajas.
Tonificar la piel
Para mantener nuestra piel tonificada debemos realizar el ejercicio de cerrar la boca y llevamos nuestra lengua al lado izquierdo de la boca y luego al derecho, y viceversa. Una vez terminadas nuestras 10 repeticiones realizamos el ejercicio sacando y metiendo la lengua lo más posible.
Arruga de los labios
Para el área de nuestros labios, se debe nombrar de forma acentuada y abriendo bien la boca, las vocales a, e, i, o u. Mantén la tensión y relajación por 5 segundos y repite 10 veces.
Reafirmar el cuello
Pronuncia de manera exagerada la letra “X”, contrayendo, también de forma exagerada, los músculos de la cara. Repite 10 veces, sin dejar de descansar 5 segundos entre cada pronunciación.
Ojeras y bolsas
Cierra tus ojos lentamente solo con los parpados inferiores y sin fruncir el ceño. Repite 15 veces. En el último cerrado, mantenlo cerrado por 15 segundo, luego relaja.
Fortalecer mejillas
Inspira y llena de aire tus cachetes al máximo, mantén el aire en ellos por 5 segundos y relaja por 5 segundos más. Realiza 10 repeticiones. Una vez terminado el primer ejercicio, tuerce tus labios hacia un lado de la cara, de manera que se estire la mejilla contraria, repite hacia el otro lado.
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